No es segregar alumnos. Es dar libertad a los que quieren aprender en castellano

Algunos dirigentes políticos se llenan la boca de libertad pero a la hora de la verdad actúan desde la imposición y no dejan que se practiquen sistemas que promueven precisamente lo que ellos defienden tan a menudo con tanta vehemencia. Y como son maestros de la palabra ahora hablan de la libre elección de lengua utilizando el término segregar, como si los alumnos que vayan a elegir el castellano vayan a vivir apartados del resto, marginados, y con unos derechos diferentes. Dejen trabajar para ver cómo se impulsará la libre elección de lengua y luego opinen. Porque lo que parece obvio es que el Govern está actuando con bastante prudencia.

El Govern exhibe firmeza después de una semana de protagonismo de Vox

En una semana en la que Vox ha ido tirando de agenda política –incluso con la fuga de un diputado–, el Govern optó el viernes por exhibir cierta firmeza, convocó a sus socios y les explicó sus límites para desarollar el punto 54 de su acuerdo de 110 propuestas, el referido a la elección de lengua en la escuela. Nada está cerrado del todo y las reuniones seguirán, pero fue a la reunión con otra carta: que no descartaba, si hacía falta, aceptar la oferta del PSIB para el techo de gastos. Son gestos, pero en política también cuentan.