Abocados a unas nuevas elecciones

Política de Estado. Muchas veces se recurre a la transición para explicar los avances que se hicieron en España tras la muerte de Franco. En ese momento histórico los partidos políticos supieron renunciar a muchas cosas para alcanzar una oportunidad histórica. Sabían que o renunciaban o existía el peligro de alargar el régimen franquista. Así nació la Constitución, y las primeras elecciones democráticas, que dieron paso a la etapa política más estable de la historia de España. Sin embargo, los partidos ahora no son capaces de hacer concesiones ni renuncias, si exceptuamos a Ciudadanos, que ha sido el partido más coherente y responsable en todo el proceso de negociación desde las elecciones de diciembre.

El futuro. O se produce un milagro o nadie podrá evitar unas nuevas elecciones. El problema es que unos comicios en junio sí pueden provocar un resultado que sirva para alcanzar un acuerdo sin necesidad de que partidos de centro derecha necesiten a formaciones de izquierdas y viceversa. Las nuevas elecciones son un riesgo para algunos de los partidos que hoy disfrutan de un amplio número de diputados. Y es posible que el electorado castigue a aquellas formaciones que no hayan sido capaces, ni siquiera, de alcanzar un acuerdo para formar gobierno. Lamentablemente, los políticos no han estado a la altura de las circunstancias. Ahora veremos si con una segunda oportunidad lo pueden estar.