La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) aseguró ayer que Eivissa tiene por delante un otoño tranquilo y normal en el que está previsto que se cumplan las previsiones de temperaturas y lluvias tradicionales para esta época del año.
Según María José Guerrero, delegada de Aemet en Balears, «en la primera parte del otoño, las temperaturas del aire y del mar se mantendrán cálidas, debido a la inercia térmica del verano, por lo que la temperatura media será de unos 15 grados centígrados».
En estos días, según la delegada balear de Aemet, «se alternarán días soleados con días con lluvias, chubascos y tormentas, que podrán ser localmente fuertes, e ir acompañadas de vientos fuertes, granizo, tornados o caps de fibló».
Después, a partir de noviembre, «lo más normal es que se alternen los días lluviosos con aquellos que traigan las primeras heladas que anunciarán la proximidad del invierno».
En este sentido, la representante de Aemet afirmó que dichas precipitaciones serán «irregulares y se concentrarán en pocos días e incluso en pocas horas, ya que como media suele llover diez días en octubre, nueve en noviembre y once en diciembre, y las tormentas únicamente aparecerán tres días en octubre, dos en noviembre y uno en diciembre».
Por otro lado, María José Guerrero, aseguró que el verano de 2012, en cuanto a temperaturas se refiere, «ha sido ligeramente más cálido de lo normal, con cuatro décimas por encima de lo que estamos acostumbrados, y en cuanto a precipitaciones más seco de lo normal». Algo que se debió a que junio fue un mes extremadamente cálido, julio prácticamente normal, agosto también muy caluroso y los primeros quince días de septiembre algo fríos.
Verano un poco más cálido
En este sentido, Serrano destacó la ola de calor que se produjo el 29 de junio y «en la que se alcanzó la máxima temperatura de todo el verano, en la Colonia de Sant Pere, en Mallorca, con 40.6 grados centígrados». Además, del 17 al 24 de agosto, hubo días de mucho calor con temperaturas diurnas entre 7 y 8 grados por encima de lo normal y una temperatura máxima de 39,6 grados, el 21 de agosto, en Sa Pobla.
Con respecto a las lluvias, hasta el 15 de septiembre ha llovido casi un 40 % menos de lo normal. En Balears, durante el verano han sido muy escasas, casi un 70% menos que otros años, siendo Menorca la más deficitaria con un 81% de déficit. En ese apartado, junio fue el mes más seco, con un 93% por debajo de la media tradicional.
Entre las lluvias más significativas, la Aemet, resaltó las que tuvieron lugar en julio acompañadas de barro, la tormenta seca del 1 de julio que en Mallorca originó rachas de viento fuertes y las precipitaciones del 30 de agosto y 12 de septiembre, en las que los chubascos fueron fuertes y las rachas de viento alcanzaron 148 kilómetros por hora en Lluc.
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