PALMA EL ECONOMICO ARENAL LOCALES CERRADOS FOTOS MARCOS CARRERAS

La temporada turística de récord que ha vivido Balears este año, tanto en términos de ocupación como en llegada de pasajeros a los aeropuertos, ha quedado atrás y el crudo invierno se impone al llegar noviembre.

En Mallorca, el cierre de hoteles ha sido masivo a principio de mes y hoy solo permanecen abiertas el 18% de la oferta total de camas. En Menorca, Eivissa y Formentera, las cifras son muy similares. Además, no está prevista la reapertura de muchos establecimientos hasta la segunda quincena del mes de abril de 2014.

La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha elaborado una estimación de la oferta de alojamiento disponible hasta el próximo abril y concluye que este año cerrarán un 2,7% más de hoteles que el año pasado. Esta disminución viene causada por dos motivos: por una parte, muchos empresarios han decidido no tener operativos sus establecimientos hasta la primavera del año que viene ante la falta de rentabilidad, y muchos otros aprovecharán para hacer mejoras en los hoteles. De hecho, el Govern ha recibido 170 expedientes de reforma para este invierno.

Más del 80% de la oferta de alojamiento en Mallorca ha cerrado sus puertas en noviembre. De los 806 establecimientos de la isla y un total de 202.213 plazas disponibles, solo quedan abiertas 36.097, un 17,51% del total. Aun así, es un 2,95% superior a la oferta de noviembre de 2012. La FEHM concluye con este estudio que el cierre de la temporada se ha retrasado hasta noviembre y que la apertura se pospondrá hasta mediados de abril.

El año pasado, la Semana Santa fue en marzo y provocó que muchos establecimientos abrieran con antelación. Otro resultado desta- cable es que, a pesar de que algunos hoteles abrieron en marzo, la temporada media ha sido de seis meses y quince días.

Si se tiene en cuenta la oferta global en Mallorca, en diciembre quedarán abiertas 31.249 plazas, esto es un 15,45% de la oferta total. En enero, los hoteles ofrecerán 35.094 camas (17,35%). En febrero estarán disponibles 59.838 plazas hoteleras (29,59%). En marzo, la oferta será de 83.382 camas (41,23%) y en abril será de 151.690 (75,01%).

Numerosos puntos de la costa mallorquina se quedarán desiertos de turistas. Cales de Mallorca es el más claro ejemplo de estacionalidad: en octubre, noviembre, diciembre y enero, todos los hoteles estarán cerrados. Y aun así es una mejora respecto el año pasado, ya que en febrero y marzo ofrecerá 66 camas de las 2.638 de las que dispone. En 2012, Cales tuvo todos sus hoteles cerrados seis meses. Una situación semejante se dará en Cala Moreia y Can Picafort, donde en noviembre, diciembre y enero la oferta será nula, igual que el año pasado.

Sóller, en diciembre y enero no mantendrá ningún hotel abierto, mientras que el año pasado se ofrecieron durante estos mismos meses la mitad de las 2.405 camas.

Las zonas de la Colònia de Sant Jordi y Platja de Muro perderán toda su oferta en noviembre y diciembre, de la misma manera que en 2012, aunque en Platja de Muro durante octubre permanecieron abiertas un 30% más de plazas que el año anterior. Ambos puntos retrasarán la apertura de hoteles en 2014. Y en Illetes cerrarán todos los establecimientos en enero, aunque en abril tendrá un 33,9% más de plazas abiertas que en 2013.

También hay variaciones respecto a la oferta de camas en Cala d'Or, Palmanova-Magaluf, Pollença, Portals Nous y en los hoteles Reis de Mallorca, que tendrán más plazas cerradas durante este invierno. En cambio, en Portocolom y Platja de Palma habrá más camas disponibles.

Respecto a la fecha de apertura, en Peguera-Cala Fornells, Santa Ponça y Capdepera se retrasará la apertura de los hoteles, mientras que en Cala Millor y Camp de Mar-Sant Elm-Andratx se adelantará. El ejemplo contrario al cierre masivo son Palma y Cala Major, donde la mayoría de hoteles no cerrarán.

El verano ha sido bueno para todos pero ahora que el invierno ha llegado, la estacionalidad sigue siendo un problema generalizado.