EFE-MADRID

El Museo del Prado presentó ayer las doce nuevas salas dedicadas a las colecciones del siglo XIX, que ofrecen, por primera vez un recorrido cronológico y continuo desde los albores del Románico hasta el despertar de las vanguardias. Este proyecto, que se abre hoy al público, constituye uno de los hitos más importantes de la historia del Museo y un paseo por el arte español desde las últimas obras de Goya hasta Sorolla a través de 176 obras, algunas de ellas nunca vistas.

«Nunca antes se ha mostrado un recorrido tan completo de la colección que sitúa al Museo del Prado a las puertas del siglo XX», señaló ayer su director, Miguel Zugaza, orgulloso de esta nueva «puesta en escena de las colecciones» del siglo XIX, que incluye un repaso de las principales tendencias y géneros del arte.

Este nuevo discurso narrativo en el Museo del Prado arranca en la galería central de la planta baja en una sala titulada con el epígrafe de Goya. Neoclasicismo y Clasicismo Académico, presidida por la escultura de Isabel de Braganza, número uno del catálogo de esculturas del Museo y reina fundadora del Prado.

Una iniciativa que ha sido considerada por los expertos como una nueva ampliación de la primera pinacoteca nacional.