El yacimiento arqueológico de Sa Caleta, en el que se asentaron
los fenicios en el año 700 antes de la era cristiana, luce una
nueva cara. La conselleria de Patrimoni ha invertido casi 60.000
euros en la rehabilitación de estos restos, declarados Patrimonio
de la Humanidad por la Unesco. Es la primera restauración del
asentamiento, descubierto en los años 70 y excavado en las décadas
de los 80 y 90.
A juzgar por las palabras del profesional que se ha encargado de
la restauración, Jordi Riera, estos trabajos eran muy necesarios,
porque estaba en «bastante mal estado». Las labores han tardado
prácticamente cinco meses y se ha tardado más de lo previsto porque
ha llovido muchos días y «para poder trabajar bien hay que esperar
a que la tierra esté seca», explica Riera, que ha contado con dos
colaboradores. Además de la restauración del yacimiento en sí, se
está pintando la valla que lo rodea, lo que tendrá un coste de
16.450 euros. En total, por tanto, la inversión asciende a 76.447
euros. Joan Marí Tur explicó también que el Ayuntamiento de Sant
Josep se ha encargado de reparar el camino.
El conseller destacó que este asentamiento se publicita en todas
las guías turísticas y si hubiera mucha demanda de visitas a partir
de ahora estudiarían poner un vigilante. Por el momento se puede
ver el monumento a través de las rejas. «Así se ve bien aunque
sería más práctico poder visitarlo por dentro, aunque está muy bien
señalizado con paneles y la gente suele respetarlo bastante»,
explicó Marí Tur, que recalcó que el monumento forma parte de la
donación que hizo la familia Matutes al Consell, que también
incluye la torre de sa Sal Rossa, donde se instalará un centro de
interpretación para explicar la utilidad de estos monumentos en la
antigüedad.
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