Las fronteras con el resto del Mediterráneo han enriquecido la
cultura ibicenca con influencias cosmopolitas a lo largo de su
historia. La creciente popularidad turística de las islas enfoca
una imagen comercial que reprime el ambiente artístico pitiuso.
Este periódico se reunió con miembros del ambiente creativo local
que achacan la falta de conciencia artística en las Pitiüses a las
limitaciones educativas.
Art Club of Ibiza exhibe arte de todos los estilos en Las
Dalias. Es una asociación informal que invita a todos aquellos
interesados a participar en la elaboración de proyectos para
incrementar la venta de obras. «Al unificarnos tenemos más
posibilidades de exponer nuestro trabajo y desarrollar el mundo
artístico que nos rodea. Es un Forum con 120 participantes; nos
encontramos en un bar de Cala Nova todos los miércoles y la
invitación se extiende a todo aquel que quiera participar. En las
reuniones comentamos inquietudes y disfrutamos de la experiencia
artística de cada uno; eso sí, sin juzgar», comentó uno de los
organizadores de la asociación, Peter Ritzer.
La tolerancia que conlleva una asociación informal puede caer en
la falta de autocrítica. «Nosotros dejamos que la crítica la haga
el público; mostramos los trabajos y ellos seleccionan. También he
de admitir que nuestras exposiciones sólo permiten exponer siete
obras por cada artista, con ello evitamos la sobre exposición de
algunas obras», afirmó Ritzer.
Uno de los proyectos del grupo «es organizar exposiciones que
salgan de la isla, dando a conocer su potencial artístico,
exportando el espíritu de Eivissa y trabajando en la reputación que
en estos momentos conlleva la isla»; una iniciativa vital para la
reputación cultural de la isla de Eivissa, un lugar ideal para
cualquier creador, «ya que el artista siempre es un disidente
social», comentó una de las participantes del club, Gabriel
Laurenz. Eivissa acoge la individualidad su libertad cosmopolita le
estimula; «aunque en Alemania nos consideran como gente que
malgasta su tiempo», añadió.
Art Club of Ibiza organiza la iniciativa noche de arte en Las
Dalias, que celebra varias citas artísticas a lo largo del año y en
la que se congregan numerosos aficionados y amigos. La tradición
artística contemporánea de Eivissa comenzó a desarrollarse sobre
todo en los 50 y tuvo un crecimiento notable en los 60.
«Estamos muy orgullosos del público que visita la muestra de las
Dalias, son personas sofisticadas que contribuyen con su diálogo
constructivo acerca de las obras.» Debido a que el artista se pasa
toda la noche de arte junto a sus trabajos, «ves tu arte en los
ojos de del público y es un forma muy directa de aprender», comentó
Laurenz.
Manuel Fresneda es un escultor autodidacta que esculpe piedra y
participa en las noches organizadas por esta asociación. «Es
importante que se creen asociaciones artísticas alternativas, no
todo artista tiene la reputación necesaria para exponer sus
trabajos en galerías», comentó Fresneda.
«Soy autodidacta, esculpo piedra con una lima. Realmente no me
considero un artista, pero esculpo y la gente compra mis trabajos.
Realmente creo que la apreciación de la creatividad depende de la
sensibilidad; hay gente que ve arte en cualquier cosa y también los
hay que no lo encuentran en ninguna parte», añadió.
Todos los artistas comentaron acerca de la importancia de
acostumbrar la sensibilidad a una temprana edad, inculcando la
habilidad de desenvolverse en un ambiente creativo.
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