Batalla campal en el partido infantil entre el Alaró y el Collerense. | Redacción Deportes

Alaró y Collerense expresaron este lunes su desolación por los graves incidentes ocurridos en el partido de infantiles, condenaron la violencia y tomaron medidas rotundas. El club de es Raiguer, a través de un comunicado, informó de la retirada del equipo infantil de la competición, mientras que la entidad palmesana apartará a los jugadores cuyos padres se vieron involucrados.

El Alaró, que expresó su «desolación» y pidió «perdón por el mal ejemplo», ha decidido retirar de la competición a su equipo infantil y pedirá a la FFIB completar el calendario sin que se tengan en cuenta los resultados. El presidente de la junta gestora del club, Llorenç Guardiola, sentencia que «hemos querido tomar una decisión ejemplar y contundente». «Retiramos al equipo y solicitaremos a la federación que nos permita jugar los partidos como amistosos sin que computen en la clasificación, ya que no queremos privar a los chicos de hacer deporte y de que jueguen», precisa.

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El club de es Raiguer, que elaborará un código ético y reglamenton sancionador, aguardará a la finalización de la investigación policial para tomar medidas contra los espectadores locales que participaron en la pelea y actuará contra el «personal federado implicado en los incidentes según el acta arbitral y los informes federativos».

El Collerense, que «condena de forma clara y contundente» lo sucedido sin ocultar su sentimiento de «vergüenza», opta por «apartar de la disciplina deportiva del club a los dos jugadores cuyos familiares participaron activamente en los desagradables incidentes». «Lamentamos profundamente que la responsabilidad recaiga también en los jugadores, pero este tipo de comportamientos van en total discordancia con la política social, de valores y educación que nuestro club quiere transmitir», explica también en un comunicado la entidad que preside Tolo Verd.


El club palmesano, cuya directiva se reunió durante más de tres horas, estudia más medidas de «carácter excepcional», entre las que podría optar por una jornada sin padres, y aguarda las resoluciones «tanto deportivas como judiciales» que «acatará».