Reynet, en acción durante un entrenamiento de esta semana.

A vida o muerte. Así afronta la UD Ibiza el partido de hoy (Estadio Johan Cruyff, 19.30 horas) contra el Barcelona Atlétic, correspondiente a la vuelta de las semifinales de la fase de ascenso a Segunda División. El equipo celeste tiene la difícil misión de ganar por dos goles de diferencia en el feudo barcelonista. De lo contrario, dirá adiós a la temporada.

El 1-2 cosechado en el Estadio Municipal de Can Misses es una losa pesada que hay que intentar levantar para seguir con vida en este playoff. El conjunto de Onésimo Sánchez deberá mejorar sus prestaciones en el terreno de juego con respecto a su actuación anterior si no quiere despedirse de esta fase por la vía rápida. Los barcelonistas fueron mejores en el primer tiempo y, tras adelantarse en el marcador en el segundo periodo, supieron aguantar atrás ante una Udé que tuvo el control del esférico pero generó menos peligro del que debería, sobre todo teniendo en cuenta que la zaga catalana tiene bajas importantes.

Onésimo cuenta para este encuentro con todos sus hombres a excepción del central Iñaki Olaortua, por lesión, y el portero Patrick Sequeira, concentrado con su selección. El técnico celeste sabe de la importancia del choque y, por eso, aseguró que «no vamos a especular». «Vamos a ir a por el partido, que se juegue a lo nuestro e intentar llevarnos la eliminatoria», dijo.

El técnico unionista apunto que sus pupilos están «muy esperanzados». «Tenemos ganas de revertir la situación, que se nos ha complicado en lo resultadista, pero tenemos esperanza», comentó. El preparador de los pitiusos tiene claro que «es una final». «O ganamos o nos vamos. Se puede hablar de final. Durante el año hay muchas finales. Las verdaderas finales son estas y para nosotros, obviamente, el partido del sábado es un cara o cruz», expuso.

El Barcelona Atlètic cuenta para este encuentro con los mismos hombres que en la ida. El mexicano sigue sin poder contar con Mika Faye, que se encuentra con la selección de Senegal. El entrenador del filial azulgrana tiene claro que los suyos deben darlo todo para    superar la eliminatoria contra la UD Ibiza, la cual tienen de cara después de haberse impuesto por 1-2 en la ida, en Can Misses. «Si hay que terminar arrastrándonos, así será», aseguró el técnico.

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El mexicano cree que el filial azulgrana no se tiene que «confiar» con el marcador, sino «intentar aumentar la ventaja». «Vamos a salir a competir, a intentar seguir haciendo esfuerzos, a tratar otra vez de terminar como terminamos en Ibiza», expuso.

El míster azulgrana considera que la Udé «tiene jugadores interesantes y muy potentes arriba», por lo que deben «estar preparados para todo». «Hay que afrontar este partido con toda la humildad posible, con toda la seriedad posible para poder otra vez competir. Contra estos equipos es difícil.

Estamos ante una gran oportunidad. Son 90 minutos de poder pasar a una eliminatoria más», explicó.

Márquez comentó que tienen «cerca un objetivo que, al principio, quizá no era el principal, pero tenemos esa gran oportunidad y no muchas veces se tiene». «Para nosotros, el staff, es la segunda oportunidad que se nos presenta y queremos hacer nuestro máximo esfuerzo para conseguirlo», dijo el entrenador del Barcelona Atlètic, para quien defender también será importante: «El fútbol no es sólo tener a pelota. Son dos fases: atacar y defender. En ese tramo en que tuvimos que defender, los chicos lo hicieron bastante bien».

El duelo entre el Barça B y la UD Ibiza es prácticamente una final para ambos equipos. Los dos quieren plantarse en la última eliminatoria, pero sólo uno puede hacerlo. La Udé necesita ganar por dos goles, ya sea en 90 o 120 minutos. La misión es complicada, pero no queda otra opción.