La Udé tuvo sus opciones y la verdad es que salieron bien plantados al terreno de juego. En la primera gran ocasión, Cedric se sacó un soberbio cabezazo para poner el 1-0 y disparar la felicidad del feudo ibicenco. Una alegría que duró bien poco, pues el filial blaugrana respondió muy rápido por medio de Pau Victor para empatar en un desbarajuste defensivo.
Antes del descanso ambos equipos tuvieron sus opciones, el partido podía caer para cualquier lado y cayó para los visitantes gracias a un gol de Marc Guiu en el segundo acto. A partir de ahí, se buscó un empate que no llegó y que obliga a la ya mencionada remontada.
El 1-2 obliga a ganar por una diferencia de dos tantos en tierras catalanas. La empresa es muy complicada, pero sin duda los jugadores de Onésimo saldrán con el cuchillo entre los dientes pues no queda otra opción. La única ventaja, por buscar algo positivo, es que al ser un filial no se espera que el Johan Cruyff vaya a ser un hervidero, como si lo serán otros campos de este playoff de ascenso.
Otra remontada
Además, en la corta historia de esta Primera RFEF, al Barça Atlètic ya le han remontado una eliminatoria. Fue el año pasado contra el Real Madrid Castillas, cuando tras ganar en la ida 4-2, perdió en tierras madrileñas por un resultado de 3-0. Si bien, en aquella ocasión ganó en su campo y la vuelta se jugó en Valdebebas.
También el Eldense, que acabaría subiendo, logró remontar la eliminatoria la temporada pasada, pero al igual que en el mencionado duelo de filiales, tenía la vuelta en casa. Por contra, el único local que cayó en la ida fue la Real Sociedad B, que lo hizo ante el Alcorcón, que en la vuelta hizo valer esa jornada.
Tampoco los números de esta temporada juegan a favor de los ibicenco. Sólo en tres partidos a domicilio logró una ventaja de dos goles. Fueron los partidos contra el Alcoyano (0-2), Melilla (0-3) y Castellón (1-3).
En resumidas cuentas, unos datos que no juegan a favor de los intereses ibicencos, pero en el fútbol se han visto muchas cosas y no es la primera vez que en otras competiciones se remontan fuera de casa resultados más adversos. Además, aunque hay que ganar de dos goles, en los 90 minutos sólo hace falta uno. Otro podría llegar en la prórroga, pues la ventaja clasificatoria está en el orden de los partidos y que no hay penaltis.
Más allá de todo esto, Onésimo se mostró optimista en la rueda de prensa, apuntó que en su punto de vista fueron los ibicencos los que tenían que haber ganado y no dudó en que la vuelta iban a ir a jugar de tú a tú y queriendo ser protagonistas para intentar darle la vuelta al marcador. «Está complicado, pero es posible», resumió. «Hay maneras de perder y formas de perder. No es lo mismo perder 1-2 siendo inferior, que perder sabiendo que podíamos haber ganado. Estoy convencido de que vamos a tener nuestras opciones. No hay que pensar en ganar de dos goles. Hay que ganar y luego ya vemos si tenemos 30 minutos más para meter otro gol. Si soy sincero, pienso que vamos a tener nuestras opciones», sentenció.
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