El Formentera se está complicado y mucho la vida. Los rojinegros han caído este domingo (3-0) en su visita al Torrent y ven la salvación cada vez más lejos. Quedan cuatro partidos y hay vida, pero el margen para fallar ha quedado prácticamente reducido al mínimo.
Los de Maikel Romero no entraron mal al partido. Los primeros minutos fueron de mucha igualdad y pocas ocasiones. A la media hora de juego un potente disparo de Chus Ruiz fue de lo poco destacable de una primera parte en la que parecía que el marcador no se movería. Eso parecía, pero en Raúl Ruiz se sacó de la chistera un gran lanzamiento de falta para poner el 1-0 en el minuto 41.
En el segundo tiempo empezó con el mismo paisaje que el primero. Apenas pasaban cosas, pero en una falta lateral, los valencianos aprovecharon la falta de contundencia defensiva para hacer el 2-0, obra de Mati. Corría el minuto 58 y las cosas se ponían muy cuesta arriba para los pitiusos.
En la recta final del choque, Ribeiro estuvo a punto de meter a los rojinegros en el partido, pero un defensa evitó que el balón acabase en el fondo de la portería. Cinco minutos más tarde, en el 85, Antonio derribaba a Boris cuando era el último defensor y el árbitro le mostraba la tarjeta roja acabando con cualquier esperanza para los de Maikel Romero.
El propio Boris se encargó de poner la puntilla en el tiempo de descuento con una bonita acción personal. 3-0 y un varapalo importante para el Formentera que ve como el agua le llega ya al cuello y necesita reaccionar.
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