Salvados por la campana

El Club Bàsquet Sant Antoni demostró ayer que también sabe sufrir. El equipo ibicenco superó por 53-55 al Mataró Parc Maresme en un partido en el que los locales tuvieron un triple para ganar. No lo anotaron y los sanantonienses se mantienen invictos y en la cima de la tabla clasificatoria.

El encuentro fue mucho más complicado de lo esperado para los pitiusos. Jordi Grimau y Slezas, conscientes de los problemas de los suyos en el día de ayer, asumieron galones para evitar el tropiezo. El catalán fue el máximo anotador del duelo con 16 puntos y, además, aportó seis rebotes. Eso sí, el que brilló en la faceta reboteadora fue el ala-pívot lituano, que recogió 19, diez de ellos en ataque.

El CB Sant Antoni Ibiza Feeling perdió el primer cuarto (17-13) y se marchó al descanso por debajo (26-24). Grimau y Slezas permitieron remontar en el tercer cuarto (31-33), pero el periodo se cerró con un preocupante 45-38.

Tocaba ponerse el mono de trabajo. Con 48-40, un parcial 0-12 resucitó a los ibicencos, que encararon el último minuto tres puntos arriba (52-55). Romero dispuso de dos tiros libres pero sólo anotó uno con 48 segundos por delante (53-55). Se antojaba crucial el posterior ataque visitante, pero Herrero falló el triple.

En la última posesión de los catalanes, Barquets trató de anotar desde la línea de tres, pero erró y ahí se acabó el partido.