Salerno intenta pasar el balón ante la muralla de tres hombres del Urbia Palma en el partido de la Copa del Rey disputado ayer. | RFEVB

USHUAÏA VÓLEY: 1

URBIA PALMA: 3

No hubo sorpresa y se cumplió la lógica. El camino del Ushuaïa Vóley en la XLIV Copa de SM el Rey fue corto. Los hombres de Piero Molducci acusaron las numerosas bajas y sin cuatro titulares cayeron en los cuartos de final ante el Urbia Palma en un partido más que digno que finalizó con un 1-3 (25-17/23-25/22-25/17-25) en el marcador.

Los pitiusos salieron muy fuerte al Javier Imbroda y liderados en el saque por César Martín ponían un parcial de seis a cero de inicio. Tiempo muerto de Palma y el partido se estabilizó. Los mallorquines empezaron a sumar y se acercaron a cuatro puntos con el 11-7. Momento en el que los amarillos pegaron otro tirón de la mano de Salerno y Sugrañes y abrían hueco hasta el 21-12 que dejaba muy encarrilado el primer set.

No hubo problemas y el Ushuaïa cerró el primer parcial con un 25-17. Los jugadores menos habituales en los planes de Piero Molducci dieron un paso adelante y cuajaron un gran set y sorprendieron al Urbia Palma.

En la segunda manga Palma reaccionó. Salió muy fuerte y con la intención de igualar el choque por la vía rápida. Dominó todo el set, llegando a conseguir una ventaja de cinco puntos (14-19). El Ushuaïa no se rindió y logró empatar con el 23-23. Remar para morir en la orilla, porque el set cayó del lado mallorquín (23-25).

En el tercer y el cuarto set fue cuando más se echó de menos a Galdón, Tapia, Elvis y Juanmi. El equipo amarillo acusó el cansancio, pero sobre todo el gran saque de Palma. Los mallorquines destrozaron una y otra vez la defensa ibicenca buscando al líbero Paquillo Fernández. Jordi Ramón y Osorio fueron imparables.

Lo cierto es que la tercera manga empezó bien para los intereses ibicencos que llegaron a mandar por 14-9, cinco puntos que se esfumaron en un momento 14-14 y partido nuevo. Palma rompió el set con el 18-21.

El golpe fue duro para los pitiusos. El Ushuaïa no se pudo reponer en el cuarto parcial y cuando se quiso dar cuenta perdía 4-10. Las caras de los jugadores ibicencos eran un reflejo de lo que se veía en la pista. El último punto cayó con un saque a favor de Ushuaïa en el que se pisó la línea y se puso en el marcador el definitivo 17-25.

En la previa al encuentro, el propio Piero Molducci había sido tremendamente realista al asegurar: «Es imposible que ganemos la Copa». Se cumplió la lógica y no hubo sorpresas. Las bajas lastraron al Ushuaïa y será Palma quien juegue hoy (17.00 horas) contra Teruel por un hueco en la gran final.