El tiempo de descuento condenó a la Peña Deportiva a una nueva derrota, la séptima en once jornadas, y se mantiene penúltima en la tabla clasificatoria. El equipo de Dani Mori hizo aguas cuando todo hacía indicar que rascaría un punto contra el Hércules. Samuel, en una falta botada por Gaspar, se encargó de dejar los tres puntos en Alicante.

Los primeros minutos transcurrieron con más pena que gloria, sin ocasiones de gol ni conatos de peligro. El conjunto peñista se sentía cómodo así ante un equipo herculano que carecía de profundidad. Incluso el público se comenzó a impacientar cuando los visitantes, por un momento, comenzaron a tocar sin que los blanquiazules presionaran lo suficiente.

Se dejaron escuchar los primeros pitidos en la grada, la misma que a punto estuvo de celebrar un gol en una jugada a balón parado a los 20 minutos de juego. Miñano puso el balón al área y Chechu, que reaparecía ayer, remató rozando la escuadra.

Ésta fue la única manera que encontró el equipo de Claudio Barragán para hacer daño. A falta de cinco minutos para el final se repitió la historia. Un saque de esquina lo remató Samuel por encima del larguero en la segunda y última aproximación de los locales al área de una Peña que, si bien no se dejó ver absolutamente en ataque, se mostró resolutiva en tareas defensivas.

En la segunda parte, con la entrada de Juli en la media punta local, Pepelu y Juanjo Nieto dieron los primeros avisos de un Hércules que sabía que estos tres puntos tenían que quedarse en casa. Con todo, los santaeularienses también pudieron avanzarse en el marcador en un remate de Gorriz a los seis minutos de la reanudación, pero Falcón atrapó el balón.

El partido parecía abocado al empate, máxime cuando Carlos desaprovechó un testarazo en la recta final. El árbitro añadió tres minutos de prolongación, algo recriminado por los locales al haberse producido seis cambios y algún que otro parón durante el choque. Con todo, ese tiempo fue suficiente para que el Hércules acabara viendo puerta. Fue, cómo no, en una jugada a balón parado tras una falta que le costó la tarjeta amarilla a Selfa. Gaspar colgó el balón al segundo palo y Samuel se disfrazó de superhéroe para llevar el júbilo al estadio Rico Pérez.