«Llevo con una estricta preparación para este torneo desde el pasado mes de septiembre. Cada día, de lunes a sábado, junto a mi entrenador, Dani Muñoz, le estamos dedicando a mi entrenamiento unas tres horas para poder mejorar tanto en el aspecto físico como en las técnicas de pelea», aseguró el luchador ibicenco.
Óscar Cofrade, que competirá en la categoría de -71 kilos, mantiene intactas sus aspiraciones de poder subir al lugar más alto del podio nacional, aunque confiesa sentirse «un tanto preocupado debido a una lesión que he sufrido recientemente en un costado cuando estaba haciendo sparring».
«Cada invierno me voy unos meses a Tailandia para seguir puliendo mi técnica de lucha. Allí he llegado a combatir como profesional contra verdaderos luchadores locales de Muay Thai, pero este año decidí no viajar a Asia para ponerme a punto para este Campeonato de España. Lo malo es que hace poco, en un entrenamiento en Barcelona, me dieron un mal golpe y me han fisurado un costilla» detalló, muy a su pesar, un más que motivado Óscar Cofrade.
De cualquier forma, el luchador ibicenco apuntó que se ve «con muchas opciones de poder pelear por el título», aunque declaró estar inquieto por la recuperación de su dolencia de aquí al inicio del torneo.
«Se trata de una pequeña lesión, pero me ha llegado en el momento más inoportuno de todos porque supone un contratiempo a falta de menos de dos semanas para el primer combate. Aunque no es muy grave, sí que es bastante dolorosa por la zona en la que está, ya que el coágulo entre los músculos intercostales me causa mucha molestia», confesó Cofrade.
A pesar de ello, a día de hoy, su objetivo sigue siendo levantar el cetro nacional, pero «tendré que estar muy concentrado en cada combate para evitar, en la medida de lo posible, que los rivales me golpeen en ese punto», matizó, por último, Óscar Cofrade.
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