1 de 2 | Toni Tugores, campeón por segundo año consecutivo de la Pujada a la Catedral, a su llegada a la línea de meta. | Marco Torres

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Pujada a la Catedral d'Eivissa
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C.Vidal01/01/12 0:00
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La Pujada a la Catedral 2011 coronó el pasado sábado a Toni Tugores y Alexia Hartmann, ambos atletas del CA Pitiús, y demostró que la prueba se queda pequeña ante tantos participantes. Un total de 576 atletas, casi 200 más que la pasada edición y, por supuesto, nuevo récord de la prueba, abarrotaron Dalt Vila en un día especial y que confiere a la carrera un aire de auténtica fiesta de fin de año.
El buen ambiente que reina antes y después de la carrera; la presencia de casi todos los atletas y otros deportistas de la Isla que no quieren perderse el evento -aunque se echó en falta la participación de algunos de los favoritos, como Ouais Zitane, Adrián Guirado o Erika Torres, pese a que estaban apuntados-; o la originalidad y diversión de la mayoría de los disfraces, hacen de esta prueba una de las preferidas por todos y explica el gran incremento que ha experimentado este año la tradicional Pujada.
Uno de los atletas que no se pierden ninguna edición es Toni Tugores. El representante del Pitiús estrenó el año pasado su palmarés en la prueba después de ocupar durante siete veces consecutivas el podio. En 2010 se pudo quitar la espina venciendo por delante de su compañero de equipo Óscar Tolosa. El sábado se repitió la misma historia y el primer puesto fue para el propio Tugores, seguido de Tolosa y, en tercera posición, por Josep Torres (Trijasa). El tiempo del ganador fue de 7 minutos y 18 segundos, trece segundos más que en la carrera del pasado año.
En la categoría femenina, Alexia Hartmann se convierte en una de las atletas más jóvenes en ganar la prueba con apenas 14 años. Hartmann, una de las grandes promesas del atletismo ibicenco, completó el recorrido en 09:07, superando en 28 segundos a la veterana María José Morell que, vestida como un pitufo, estuvo a punto también de conseguir algo inédito hasta ahora como es ganar la prueba llevando un disfraz.

Nuevo recorrido
El éxito de la prueba fue tan completo que los organizadores ya se plantean nuevos retos. «El circuito es bastante corto para tanta gente y no hay duda de que la prueba se queda pequeña. Para el próximo año queremos hacer la carrera más larga o un recorrido diferente, porque aquí ya no cabemos», declaró Toni Roig, presidente del CA Pitiús, que se mostró «satisfecho y contento» por la participación y por el triunfo, por cuarto año consecutivo, de atletas de su club.

El dato: Tiburones, premio al mejor disfraz
La elección al mejor disfraz en la Pujada a la Catedral es cada vez más complicada. La imaginación de los participantes y el hecho de que cada vez son más las personas que se atreven a correr disfrazados hacen que la decisión del juez encargado de premiar este apartado sea ardua. El primer premio, sin embargo, no tuvo demasiada discusión y correspondió al grupo formado por ‘Tiburones contra bañistas'. El segundo puesto fue para ‘Papa Noel y sus renos' mientras que, en tercera posición, quedó ‘La niña del exorcista'.

Toni Tugores: «Me hace mucha ilusión ganar aquí»
Antoni Tugores (CA Pitiús) sumó su segunda victoria consecutiva en la Pujada a la Catedral: «Desde los 19 años hago podio en esta carrera pero, hasta el año pasado, no pude ganarla porque era imposible hacerlo ante atletas como Tissei o Zitane. Me hubiese gustado que hubiese corrido Zitane, pero la verdad es que me hace mucha ilusión venir a esta prueba y ganarla. También es de agradecer que cada vez haya más gente participando y que la carrera sea todo un éxito».

Alexia Hartmann: «No esperaba ganar esta carrera»
Alexia Hartmann añadió un nuevo éxito al año 2011, que ha sido bastante positivo para la atleta del CA Pitiús. «No esperaba ganar esta carrera. Mi objetivo, en principio, era sólo bajar de los 10 minutos. Es una prueba bastante dura y las cuestas se notan mucho. Hubo un momento en el que creí que no podría acabar, pero nunca hay que pararse y hay que seguir adelante. Cuando oyes que la gente ya empieza a chillar y animarte es el momento de apretar», señaló Hartmann.

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