Pesadilla antes de Navidad

No hay manera. El Space Gasifred volvió a marcharse de vacío una jornada más. El equipo ibicenco dejó escapar una oportunidad de oro para lograr la victoria ante un Andorra al que tuvo contra las cuerdas. Y es en esos momentos cuando hay que rematar, porque, de lo contrario, tu rival puede resucitar, como pasó ayer. El deseo de ganar se convirtió en desconcentración y los andorranos remontaron el partido en el último minuto y medio, cuando parecía imposible que el 'Gasi', al menos, no puntuara.
En el cómputo general del partido, el cuadro de Hugo Nava fue superior, especialmente en la primera parte. Y eso que el comienzo no fue precisamente muy alentador, pues Carlinhos, en una jugada de estrategia, estrenó el marcador a los tres minutos. La reacción no se hizo esperar y Alves, en una acción eléctrica, estableció las tablas a los 15 segundos.
Los azulinos se vinieron arriba, perdieron el respeto a su rival y, apoyados en la figura de Leo, se hicieron dueños y señores del encuentro. El dominio era tal que los visitantes se metieron en el bonus de faltas en menos de diez minutos. Roberto Herrero forzó la sexta y Leo no perdonó desde los diez metros. El brasileño tuvo el tercero en otra acción igual, pero lanzó al poste. Entonces comenzó la primera parte de la pesadilla particular de los ibicencos. En el minuto 17, y cuando mejor estaban los locales, Moisés, en una jugada de estrategia, y Paulinho, tras una buena individualidad de Cabinho, remontaron el partido.
Nava, que había usado hasta entonces dos cambios, dio entrada a Coria para dar algo de frescura a los suyos. Una genialidad del gallego permitió a Leo empatar la contienda tras el rechazo del portero para dejar en tablas al descanso. Mal menor.
Tras el asueto, las mejores oportunidades las tuvo el Space Gasifred. Leo falló un mano a mano y Clayton se topó con el portero en su semichilena. El guión del acto anterior se repitió entonces y Cabinho, tras una pérdida de Alves -los locales reclamaron falta-, puso por delante a los suyos. El brasileño se sacó la espina en la jugada posterior, cuando batió por debajo de las piernas a Marimón, un portero que se incorpora con asiduidad al ataque pero que no trasmite demasiada seguridad bajo los tres palos, tras un córner.

Expulsión
La expulsión de Cabinho dio pie a la remontada gracias a un disparo de Clayton. El Andorra se volcó en ataque y, tras varias paradas de Iván, Paulinho acabó empatando. Entonces, Clayton destapó el tarro de las esencias para fabricar el sexto tanto de los suyos con su clase particular. Se marchó de todo defensor que le salió al paso y dejó el balón franco a Roberto Herrero. Quedaba sólo minuto y medio por delante y parecía que los puntos se iban a quedar en casa, pero nada más lejos de la realidad. Tras sacar de centro, Paulinho igualó el marcador en un disparo exterior. Lo peor vino después. Alves trató de hacer de adivino para anticiparse a un balón y dejó sin marca a Paulinho, propiciando un dos contra uno que Jonathan culminó. Increíble.
De esta forma, el Space Gasifred vivió una pesadilla antes de Navidad. El panorama mejorará o empeorará en función de lo que suceda en el partido aplazado contra el UMA Antequera.