Gavilán impone la lógica

La justicia a veces se abre hueco en un deporte tan imprevisible e irracional como el fútbol. La Peña Deportiva empató ayer un encuentro que tenía perdido por un error infantil de Youssouf, quien ayer tuvo que hacer las veces de central ante las numerosas bajas en defensa que presentaba el equipo. La lógica tardó 88 minutos en imponerse sobre el césped del Estadi Balear, y fue Antonio Gavilán, lateral zurdo que regresaba tras una lesión y que ayer actuó como delantero los últimos 20 minutos, quien restableciera el orden natural de las cosas y empatara el encuentro.
El bloque de Luis Rueda llegaba mermado a uno de los choques más atractivos de la temporada frente a un Atlètic Balears tan portentoso físicamente como sobrevalorado en calidad técnica.
En el primer minuto de juego el esférico llegó hasta los dominios de Youssouf. El guineano se entretuvo y antes de poder despejar perdió el cuero en favor del goleador Edu Moral. El pichichi blanquiazul no perdonó y, con un potente disparo al primer palo, inauguró el marcador.
Desde entonces la Peña tuvo que remar contra corriente, pero no perdió la paciencia ni sus principios. Iván Torres, descomunal en la creación de balón, y Nico, brillante ayer como pivote defensivo, se comieron el centro del campo del Atlètic Balears, mientras Nacho del Moral comenzaba a despuntar por la banda izquierda. El juego combinativo de la Peña llegó a abrumar a su rival, consciente de que el 1-0 era un botín excesivo que debía guardar bajo llave.
El dominio no se traducía en ocasiones y el bloque de Àngel Pedraza se preparaba para matar a la contra. Los nigerianos Peter y Rafeal, así como el propio Edu Moral, formaron un tridente letal al acecho de los fallos defensivos de la Peña.
El encuentro se acercaba al descanso sin ocasiones de gol. La más peligrosa la tuvo el Balears con un remate de cabeza que sacó Fofi bajo palos (min. 40) y, antes de acabar, Carlos López se marcó un jugadón por velocidad, marca de la casa, que no tuvo consecuencias.
Cambia el guión
El panorama estaba complicado. El equipo dominaba, pero no pisaba el área. El guión apenas varió, hasta que Luis Rueda movió ficha. Obligado por los problemas físicos tuvo que sustituir con premura a Osky e Iván Torres, y a los 60 minutos cambió las reglas del juego. Dio entrada a Antonio Gavilán en la punta de ataque y a Vicent por delante de Nico. Otorgó todo el carril derecho a Raúl Gómez e indicó a sus hombres que pasaran al juego directo. Un juego al que no están acostumbrados, pero que ayer cobraba fuerza ante la columna defensiva montada por el bloque mallorquín.
La Peña se lanzó al ataque sin mirar atrás. Quería demostrar valentía ante un rival que menguaba con el paso de los minutos. Con menos cabeza y mucho más corazón fue arrinconando al plantel palmesano, que apenas inquietó la meta de Eneko en toda la segunda mitad. Y en el último minuto se hizo justicia. Gavilán, siempre a la caza de un balón perdido o un centro al área tuvo su gran oportunidad en una internada de Nacho del Moral por banda izquierda. El catalán puso un balón preciso a la espalda de la defensa y el lateral cordobés, en plancha, cruzó de cabeza haciendo inútil la estirada de Linares (min. 89). El empate deja al Atlétic Balears en cabeza por el gol average particular, pero la Peña sale reforzada moralmente porque ayer volvió a ser mucho mejor que su rival.