Mario Ormaechea, entrenador del San Rafael, lamentó no haber conseguido el ascenso, porque «el equipo lo ha dado todo. Los jugadores se merecen un diez en esfuerzo y ganas».

Para el técnico, las claves estuvieron en «el primer gol y la expulsión». «Nos han matado», agregó el preparador, que también criticó «los fallos puntuales» como el del primer gol: «En el córner fallan dos o tres futbolistas cuando cinco de ellos se habían quedado en su campo. Con cuatro que fueron al remate la liamos. Ese gol ha sido clave. Si no lo marcan, seguro que pasamos, porque en el segundo tiempo bajaron físicamente. La expulsión de David Escandell también nos mató».

El entrenador del cuadro rafeler también mandó un mensaje al colectivo arbitral: «Si ves los arbitrajes que hacen en Palma y los que hay aquí, no te lo crees. Este árbitro ha pitado bien, pero hay cuatro o cinco jugadas que en Palma te las comes. Con un arbitraje así, allí habríamos ganado 0-3 seguro. Hasta los de fuera dicen lo bien que ha estado el árbitro. El árbitro debe pitar así, pero en todas las islas. Parecía que el equipo de casa era el de ellos. Allí te machacan. Es un desastre».