Jordi Fernández agota sus últimas días en Eivissa. El entrenador catalán inicia mañana en Zamora la concentración con la selección femenina sub 20 que disputará el Europeo en Gdynia (Polonia) del 9 al 19 de julio y posteriormente, tras pasar por el quirófano para ser intervenido de la cadera, recalará en Salamanca para iniciar su nuevo reto en el banquillo del Perfumerías Avenida.

- ¿Cómo valoraría los cinco años entrenando al PDV?

- La opinión general y no sólo la mía es que han sido cinco años muy positivos en todos los sentidos. Vine a este club para conseguir resultados y que el club crezca y es lo que se ha conseguido. Lógicamente el mérito no sólo es de Jordi Fernández, sino que ha sido un trabajo de todos, de la directiva, jugadoras y cuerpo técnico.

- ¿Qué ha sido lo mejor en todo este tiempo? ¿Y lo peor?

- No creo que haya habido nada malo. A lo mejor podría haber sido la eliminación en Europa, pero llegamos a octavos de final y casi nos clasificamos para los cuartos. También tuvimos un principio de año muy duro debido a las lesiones de Sancho y Pee Wee, pero luego se mejoró muchísimo. Por eso no ha habido nada malo, porque los primeros años no se consiguieron los mismos resultados, pero el presupuesto era bajo y cubrimos objetivos. En cuanto a lo mejor, sin duda ha sido la progresión del club y llegar en los dos últimos años a semifinales tanto en la Copa de la Reina como en el campeonato de Liga.

- ¿Cree que su paso por el PDV le ha servido de preparación para llegar a un grande?

- No, porque cuando vengo al PDV ya había entrenado 25 años en categoría masculina y varios años en Liga Femenina. Mi paso ha sido muy enriquecedor y me han dejado trabajar con total libertad, pero no creo que fiche por un grande por haber estado estos años en el PDV, primero porque para mí este club ya es un grande.

- ¿Cómo está viendo desde fuera los problemas del PDV?

- Una vez que fiché por el Avenida me he mantenido al margen, pero sí estoy al tanto de todos los problemas económicos por los que atraviesa el club. Luego, a nivel de fichajes y del entrenador nuevo o bien no los tiene todavía o bien los lleva con mucho secreto, por lo que no puedo opinar. El club va a trabajar de acorde con el presupuesto para hacer la mejor plantilla posible, pero está claro que Víctor Torres tiene mucho trabajo por delante.

- ¿El próximo entrenador del equipo lo va a tener difícil?

- Seguro, pero lo que no quiero es que a esa persona se le compare conmigo. Es como si a mí se me compara en Salamanca con José Ignacio Hernández y me exigen ser subcampeón de Europa. Al entrenador que venga se le tiene que liberar de esa presión, porque va a tener que trabajar con un presupuesto menor y el objetivo será no descender antes que intentar repetir la final de la Copa, por ejemplo.

- ¿Cree que el PDV ha tocado techo con usted en el banquillo?

- Si la directiva cree que las instituciones no van a ayudar, si no se logra fusiones para aunar esfuerzos y si no se trabaja todos a una para mejorar, evidentemente el PDV ha tocado techo. No creo que en la isla no se tengan en cuenta los méritos realizados por el club, pero otra cosa es si la gente tiene interés en que Eivissa cuente con un equipo en máxima categoría y del nivel que se ha visto en los últimos años. Hay que valorar si interesa tener un club en la elite, porque eso sólo se logra con el esfuerzo de todos.

- Ahora, en Avenida, sus problemas serán otros. ¿Cree que podrá superar al Ros Casares?

- Para eso voy a Salamanca. Soy consciente de lo difícil que es superar a un equipo como el Ros, pero es como el alumno que va a por el 10 y consigue un 8,5 de nota. Es algo positivo. Por eso yo voy a ir a por el 10, porque estoy en un club que puede vencer al Ros. Llevo muchos años remando ahí abajo, con presupuestos en muchos de los casos bajísimos y he sacado la cabeza siempre o casi siempre. Ahora la exigencia va a ser muy alta, pero también tengo unas jugadoras de primerísimo nivel, capaces de hacer un buen trabajo en las tres competiciones.

- Lo primero va a ser el Europeo con la selección sub 20...

- Ahora mismo dependo de si jugadoras como Alba Torrens o Laura Nicholls, que están con la absoluta, vienen con nosotros a Polonia. Pero cuento con las mejores jugadoras jóvenes, como la propia Torrens, Ouviña o Xargay y el objetivo es, como siempre, pelear por las medallas.

- ¿Se deja alguna asignatura pendiente en Eivissa?

- En absoluto. Me voy de la mejor manera que se puede ir un entrenador, dejando muchos amigos, muy agradecido de como me han tratado y saliendo de un club al que por fortuna puedo volver a trabajar. Estoy muy contento de haber aportado para hacer que este club crezca y el mejor premio es el hecho de tener las puertas abiertas para volver algún día.

- ¿Es por lo tanto un hasta luego y no un adiós?

- Espero que sí. He estado cinco años aquí y he de reconocer que Eivissa engancha, por lo que mi deseo sería volver a este club algún día.