Quique Yagüe cuenta con pocos jugadores de la primera plantilla para afrontar el partido ante el Orihuela.

El Eivissa quiere dejar atrás todos los problemas extradeportivos y centrarse en el partido de este mediodía en Can Misses ante el Orihuela, el primero del año y el último de la primera vuelta. Sin embargo, ese objetivo es más complicado de lo que parece y Quique Yagüe, que sólo cuenta con once jugadores del primer equipo y algunos están tocados, asegura que ganar hoy «sería una auténtica proeza».

El técnico no puede contar con los sancionados José Rodríguez, Jonan García y Raúl Rodríguez, expulsados en el partido ante el Ontinyent. Además, el lateral José García es baja por sanción, mientras que Raúl Garrido y Joan Castillo arrastran problemas físicos. A estas bajas hay que sumar las de Pisano, en paradero desconocido, Biel Guasp, desligado voluntariamente del club, y Carlos López, que aunque ayer apareció su baja parece cuestión de días. Estas bajas obligan al entrenador a recurrir a cinco jugadores del filial para completar la lista: Víctor, Bonilla, Cabrera, Samir y Carlos Fernández.

«Es muy complicado jugar en estas circunstancias, aunque no tengo duda de que los jugadores van a dar la cara y que quieren sacar el partido por cuestión de orgullo. Sin embargo, son muchas las bajas y hay que tener en cuenta que meter ahora a futbolistas del filial es darles demasiada responsabilidad, porque la presión es máxima. Con todas estas circunstancias adversas sería una auténtica proeza sumar los tres puntos», declara Yagüe.

Todas esos problemas llegan en un partido que, según el técnico, es de esos que valen su peso en oro. «Son casi seis puntos en juego», declara el abulense. En caso de ganar, el Eivissa podría abandonar los puestos de descenso y dejar atrás a un rival directo. Además, un triunfo serviría para calmar en parte el ambiente de cara a la reunión entre directiva y plantilla de este lunes, con el famoso plan de viabilidad de por medio, que será decisiva de cara al futuro de la entidad.

En cuanto a la alineación, Yagüe tiene poco margen de maniobra. Manu parece fijo en la portería, mientras que en defensa tendrá que contar con Víctor e Ibon Begoña, laterales, y Castillo y probablemente Rial, centrales. En el centro del campo podrían jugar Germán y Raúl Garrido, como pivotes, y De Pablos, Àngel Sánchez y Juan Carlos, más adelantados. Por último, en ataque alineará al único delantero que le queda, Julien Hornuss. Eso si no hace debutar a algún otro jugador del filial.

Tevenet

Luis García Tevenet colgó el pasado mes las botas para hacerse cargo del Orihuela. El ex futbolista del Sevilla, Atlético de Madrid o Las Palmas, entre otros equipos, tiene la responsabilidad ahora de intentar sacar de los puestos de descenso a los que hasta hace muy poco eran sus compañeros. «Cambiar el terreno de juego por el banquillo es una experiencia bonita, aunque requiere más horas y dedicación. Este es mi tercer partido al frente del equipo y tengo la misma ilusión que cuando debute como futbolista en Primera. Todavía no he tenido tiempo de echar de menos mi etapa como jugador», declara el sevillano.

El Orihuela, al igual que el Eivissa, está muy necesitado de puntos. El conjunto alicantino, en el que el recién fichado Ricardo Molina debuta en la convocatoria y que tiene las bajas de Javi Jiménez y Fleki, encadena tres derrotas seguidas. «Somos dos equipos que, anímicamente, estamos muy tocados y que necesitan la victoria para ganar en moral», añade Tevenet.