Efe|MONZA
El alemán Michael Schumacher confirmaba poco después de su victoria en el Gran Premio de Italia, algo que ya se presentía en las últimas semanas, y que es su retirada de la Fórmula Uno cuando finalice la temporada.

Michael no se va con las manos vacías, sino que lo hace llevándose consigo la mayoría de los récords, que serán difíciles de superar: 7 títulos mundiales y en lucha por el octavo, 247 Grandes Premios (178 con un Ferrari) disputados , 90 victorias, 68 «poles» y 75 vueltas rápidas.

«Las palabras no bastan y diga lo que diga ahora nunca podré expresar lo mucho que amo este mundo fascinante de los deportes de motor y todo lo que me ha dado. Desde el karting a la Fórmula Uno he vivido momentos que jamás olvidaré. Estoy profundamente agradecido por todo lo que he tenido», reza el comunicado conjunto emitido por Ferrari y que reprodujo en la conferencia de prensa posterior a la carrera. «Quiero dar las gracias a todos los que me han acompañado, apoyado e inspirado desde mi infancia. Sobre todo, quiero dar las gracias especialmente a Corinna y a mis dos hijos, que me han dado la fuerza para hacer lo que he hecho».

Siguió diciendo con el gesto cada vez mas emocionado que: «Todos estos años en la Fórmula Uno han sido fantásticos, especialmente los que he pasado junto a mis amigos en la «Scudería». Pronto mi futuro le pertenecerá a mi familia, aunque me alegro de seguir siendo parte de Ferrari. Sin embargo, ahora lo que importa es este campeonato del mundo».

Posteriormente, en la rueda de prensa, el kaiser apuntó: «No quiero marcharme cuando esté acabado, por eso he tomado la decisión de irme ahora», comentó un emocionado Michael Schumacher, que no tuvo fuerzas para contestar cuando le preguntaron si echará de menos el deporte y se limitó a decir después de respirar hondo «perdonen».

Sobre la carrera Schumacher dijo que «la victoria ha sido maravillosa, estar en el podio con Jean Todt ha sido una emoción indescriptible. Desde arriba viendo la marea de aficionados se podía sentir el amor que tienen por Ferrari». Añadió un raramente emocionado Michael Schumacher que «si hubiera tenido que hablar en el podio de mi decisión de retirarme no me habrían salido las palabras».

Con respecto a la carrera señaló que «había transcurrido sin problemas, esperábamos que Kimi se parara antes que nosotros y así ha sucedido y me he podido poner el primero y todo ha salido según lo teníamos previsto y el momento más emocionante ha sido la última vuelta». Prosiguió Schumacher diciendo que cuando cruzó la línea de meta: «dije por radio a mis amigos del equipo cual era mi decisión y ha sido difícil controlar la emoción».

Por su parte el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, que ha estado presente desde ayer en el circuito ha manifestado que: «Siempre se ha dicho que la decisión de retirarse sería solo suya, pero ahora que la ha tomado tengo una sensación de tristeza».