Rodrigo nació en Santander, se formó en las categorías
inferiores del Racing y procede del Mar Menor, club donde no llegó
a cuajar tras llegar desde el Ribamontán cántabro. Según Paco
Marín, técnico del equipo, es un «delantero centro con mucha
movilidad en la zona de arriba, un lugar que necesitábamos
reforzar».
Él, sin embargo, prefiere no definirse: «Prefiero que me definan
los que están fuera viéndome porque estas cosas siempre dan lugar a
malos entendidos». Sí se atreve por contra a señalar entre sus
cualidades que es «trabajador y un ganador nato». Rodrigo espera
aportar a la Peña Deportiva «ilusión, que es lo principal, y mucho
trabajo. Si todo eso lo unimos a los goles mejor». Su objetivo es
al menos jugar la fase de ascenso con su nuevo equipo, con el que
ha firmado hasta final de temporada con opción a renovar por otra
más si ambas partes están de acuerdo en junio. En su opinión, el
club tiene muchas posibilidades de hacer algo grande este año: «La
semana pasada estuve viendo el partido contra el Montuïri, que era
el sexto clasificado, y se veía que nosotros éramos superiores en
todo. Espero subir a Segunda B y quedarme después varias temporadas
en el club».
Si Paco Marín lo estima oportuno el delantero podrá viajar
mañana a Mallorca para formar parte de una convocatoria en la que
no estarán Maline, sancionado por acumulación de tarjetas, y Tino,
que no ha entrenado por problemas en los abductores.
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