Mallorca y Valencia saldaron con un empate (0-0) el partido en Palma, un resultado que les aleja de sus respectivos objetivos y que les sirve de bien poco en el tramo final de la Liga.

El Valencia flojeó durante 80 minutos en Son Moix, y se lanzó al ataque de forma decidida cuando el tiempo apremiaba. Quiso ganar cuando más complicado lo tenía y se encontró con un rival que cometió muchos menos errores que en jornadas anteriores. Eso sí, el Mallorca sigue sin marcar un gol por quinto partido consecutivo.

El debutante en Primera Víctor Casadesús tuvo las dos mejores oportunidades para abrir el marcador. En la primera (min. 7) anduvo lento de reflejos ante Cañizares y remató tarde y mal; en la segunda (min. 43), casi sorprende al meta valencianista, que reaccionó bien para despejar un balón que le iba a los pies. Después, se le vio muy poco.

Acierto
Cañizares, que mantuvo la titularidad supuestamente amenazada por Andrés Palop tras su fallo de la pasada jornada ante el Málaga, resolvió con acierto todas las ocasiones en las que fue exigido.

El partido empezó para el Valencia con la mala noticia de la lesión, mientras hacía los ejercicios de calentamiento, del argentino Pablo Aimar. Fue sustituido por el brasileño Fabio Aurelio, que le dio mucha movilidad a la banda izquierda, aunque su equipo careció de la sorpresa que le da Aimar en los metros finales.

El equipo de Antonio López se lo tomó con mucha tranquilidad, quizás demasiado.