Tito Sobrín imparte instrucciones a sus jugadoras en un tiempo muerto.

Sólo quedan 24 horas para que el segundo partido del 'play off' de semifinales de la Liga Femenina 2 entre el Rivas Futura y el CB Puig d'en Valls se ponga en marcha y donde el conjunto ibicenco puede alcanzar la hazaña de lograr el ascenso a la máxima categoría del baloncesto femenino nacional, la Liga Femenina, en caso de conseguir la victoria en el segundo partido que se celebrará mañana a partir de las 19'30 horas en tierras madrileñas. El primer triunfo logrado el sábado ante el Rivas en el pabellón municipal de Santa Eulària es el penúltimo peldaño para llegar a la gloria.

El entrenador del PDV, Tito Sobrín, afronta este encuentro con mucha ilusión, aunque con algunas inquietudes en cuanto a la forma de parar el juego del rival: «Todavía nos quedan dos sesiones por realizar y estamos estudiando pequeños detalles a nivel táctico para frenar el juego del Rivas. En el primer partido, las jugadoras Silvia Hernández y Natalie Díaz nos hicieron mucho daño en el juego exterior». El entrenado leonés tiene la solución para no dejar jugar a ambas jugadoras: «Estamos preparando en los entrenamientos ayudas defensivas para impedir que Hernández y Díaz lleven el ritmo de juego del Rivas. Otro de los aspectos que estamos trabajando y valorando son nuestras situaciones ofensivas».

También Sobrín reconoció que el encuentro será tremendamente parejo, al igual que el primer partido: «Creo que el partido estará completamente abierto. De todas formas, tenemos una ventaja importante ya que si nos ponemos por delante en el marcador, el Rivas se pondrá nervioso y debemos aprovechar este factor». En este sentido, Tito Sobrín comentó que «el equipo debe ser inteligente y debemos estar atentos cuando tengamos la oportunidad de sentenciar al rival».

El entrenador del PDV analiza cuáles pueden ser las claves para vencer al Rivas y, de este modo, lograr el ascenso: «El equipo debe parar el juego exterior de Natalie Díaz y Silvia Hernández, además de controlar el rebote, sobre todo, el defensivo. También debemos imprimir un elevado ritmo de partido para ahogar al rival». De todas formas, Sobrín reconoció que el PDV está en desventaja con respecto a nuestro contrincante en el banquillo:«La verdad es que estamos jugando sólo con seis jugadoras y el Rivas tiene una gran ventaja en las rotaciones ya que tiene hasta cinco jugadoras que ocupan el puesto de pívot. Lo que haré es dosificar el esfuerzo del equipo ya que hay jugadoras como Montse Magre o Jelena Zrnic que llegaron muy justas en el último partido y debemos cuidar más este aspecto».