EUROPA PRESS - ROMA
El partido comenzó con las lagunas de concentración defensivas que se están convirtiendo en algo habitual cuando llegan los partidos claves, como ya sucedió en la Intercontinental, en la Supercopa de Europa, y contra el propio conjunto italiano en el Santiago Bernabeú.
Los fallos defensivos le costaron al equipo blanco el primer gol. Una internada de Castroman ante la inoperancia defensiva en bloque de la defensa madridista permitió que el volante italiano llegase ante el área y cediese a Nedved cuyo disparo y tras tropezar en César se introducía en el fondo de las mallas.
Pero cuando peor jugaba el Madrid, un pase en profundidad, minuto 32, en el ataque madridista habilitó a Solari, en su internada por la izquierda, que aguantó perféctamente la salida de Peruzzi y de perfecta vaselina conseguía el empate.
En la reanudación, el conjunto italiano salió en búsqueda de la victoria. Para ello adelantó sus líneas y puso el ritmo del encuentro que más le interesaba, una vez que se hizo con la posesión del esférico. El Lazio se adelantó en los primeros minutos, en el 53, cuando una nueva internada de Castroman por la izquierda contó con el beneplácito de la zaga madridista y la ayuda inestimable de Geremi, que con el pecho habilitaba un balón para que Crespo marcara.
La salida de Munitis al terreno de juego mediada la segunda parte fue providencial ya que colgó un balón desde la derecha y Raúl, en pugna con dos defensores, cabeceo por encima de Peruzzi consiguiendo el empate y aquí se acabaron las esperanzas del Lazio.
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