Imagen de Justin Baldoni y Blake Lively durante una escena. | 20M

«Él quiere sentir que podemos enterrarla». Así se expresaban los siete denunciados por la actriz Blake Lively en varios mensajes donde se detalla la campaña de desprestigio promovida por su compañero en el filme Romper el Círculo (ha recaudado casi 350 millones de dólares en todo el mundo), Justin Baldoni, y que han sido publicados este lunes por The New York Times.

Según el medio estadounidense, la demanda de la actriz, conocida por la famosa serie Gossip Girl, incluye miles de páginas de mensajes de texto y correos electrónicos que Lively obtuvo mediante una citación judicial y en los que se probaría cómo Baldoni y su equipo de marketing habrían ideado una campaña de desprestigio contra al actriz.

Así, un publicista (el citado medio no especifica quién) escribía a Melissa Nathan, la experta en gestión de crisis contratada por Baldoni y Jamey Heath, el productor principal del filme, que el actor y director quería ver cómo acababan con la mujer después de que empezaran a oírse rumores sobre el acoso de Baldoni. «Sabes que podemos enterrar a cualquiera», contestó Nathan.

En las semanas siguientes, Nathan, que ha trabajado para Johnny Depp y los raperos Drake y Travis Scott, utilizó a la prensa presionando para evitar historias sobre el comportamiento de Baldoni y reforzar historias negativas sobre Lively, según muestran los mensajes de texto a los que ha tenido acceso el mencionado medio.

Un "plan de varios niveles"

Este sábado se hacía pública la demanda de Lively contra Baldoni, el estudio de la película Wayfarer, la experta en gestó de crisis, el productor y otros miembros del equipo por acoso sexual durante la grabación y de una posterior campaña de desprestigio. La demanda, que según el The New York Times fue presentada el viernes en California, acusa a Baldoni y a Wayfarer de embarcarse en un «plan de varios niveles» para dañar la reputación de Lively después de que ella se quejara del «acoso sexual repetido y otros comportamientos perturbadores» sufridos durante el rodaje.

El plan, según la demanda, incluía una campaña en redes sociales y la publicación de noticias para dañar la reputación de Lively. «Estas afirmaciones son completamente falsas, escandalosas e intencionalmente lascivas, con la intención de herir públicamente», declaró la defensa de Baldoni. Lively dijo en The New York Times que espera que su demanda «ayude a proteger a otras personas que puedan ser atacadas».

Tanto el estudio Wafarer como la defensa de Baldoni han negado del todo que las acusaciones de Lively sean ciertas. "Estas afirmaciones son completamente falsas, escandalosas e intencionadamente salaces con la intención de herir públicamente y volver a encender una narrativa en los medios de comunicación«, escribió el abogado, Bryan Freedman, que apunta a que Lively inició »historias negativas y completamente inventadas y falsas en los medios de comunicación" sobre Baldoni, motivo por le que se contrató a una experta en gestión de crisis.

"Espero que mi acción legal ayude a descorrer el telón de estas siniestras tácticas de represalia para perjudicar a las personas que denuncian conductas indebidas y ayude a proteger a otros que puedan ser objeto de ellas«, ha asegurado Lively, que apunta a acoso sexual durante la grabación de escenas subidas de tono. Tras la polémica, rostros conocidos de Hollywood como las actrices Gwyneth Paltrow y Amy Schumer han salido en apoyo a la actriz. También su hermana, que le ha agradecido que de la cara para contar lo que pasa entre bambalinas. »Gracias por exponer el lado siniestro de Hollywood", ha dicho.