La Policía Local de Santa Eulària informó ayer de la detención de un conductor borracho que fue interceptado después de que intentara huir de un control establecido en Cap Martinet. Según el atestado policial, el sospechoso, que dio tasas de 0,88 y 0,87 mg/l en la etilometría, fue apresado después de una persecución de varios cientos de metros y que llegó a su término cuando el infractor estrelló los bajos de su vehículo contra uno de los bajos de la zona.

Por otra parte, los agentes que llevaron a cabo este dispositivo sancionaron a otros tres conductores que fueron sorprendidos bebidos sin que llegaran a superar la tasa de 0,60 mg/l, índice por el que se instruyen diligencias penales por un delito contra la seguridad del tráfico.