Aquí los bomberos ya habían embarcado el cuerpo en una lancha de los GEAS que les esperaba en este pequeño puerto. | (c) Sergio G. Canizares

La autopsia confirmó ayer que la muerte de la joven en Cala Tarida fue efectivamente un accidente. De la autopsia se desprende que la joven cayó de pie, y al dar contra el suelo sufrió muchos daños internos y en sus órganos vitales lo que provocaron el fatal desenlace.

Según describió la Guardia Civil, cuerpo armado encargado de la investigación de los hechos, justo antes de la caída el novio de la fallecida le pidió en matrimonio allí en Punta Tarida y en presencia de sus amigos. Según las declaraciones recogidas por la Benemérita, el novio pidió a la chica en matrimonio y ésta sorprendida e ilusionada empezó a dar saltos de alegría con la mala pata de que tropezó y cayó 15 metros abajo por el acantilado.

Esta zona de Cala Tarida es especialmente bella y su situación permite disfrutar de una puesta de sol espectacular. La joven iba acompañada también por un grupo de amigos que, según parece, estaban en Eivissa de vacaciones, y muy probablemente el novio tenía planeado ya desde hacía mucho tiempo pedir a su pareja en matrimonio expresamente en este viaje, los dos eran de Bulgaria y estaban de vacaciones junto a unos amigos.

Recordemos que el accidente sucedió el martes sobre las 13,40 horas. Una mujer búlgara de 29 años de edad se precipitó a una altura de 20 metros. Cuando los servicios sanitarios de emergencias llegaron al lugar la joven aún vivía aunque estaba inconsciente. Minutos más tarde la mujer sufría una parada cardiorespiratoria, los servicios sanitarios le practicaron la reanimación cardiopulmonar pero la accidentada ya no respondió al intento de reanimación. Los bomberos trasladaron el cuerpo de la joven hasta un pequeño puerto y allí los GEAS de la Guardia Civil trasladaron a la fallecida hasta tierra firme para proceder a la autopsia que ayer confirmó que lo sucedido fue un accidente.