Parte de la droga decomisada en la operación Flecha.

Parte de la droga decomisada en la operación Flecha.

J.M.AlonsoEivissa14/09/14 0:00
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La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha confirmado las penas de prisión impuestas por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial a seis condenados por tráfico de drogas en el marco de la operación Flecha, que llevaron a cabo agentes del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil en agosto de 2010. Los condenados, la mayor parte de ellos de nacionalidad británica, recibieron penas que oscilan entre los siete años y medio de cárcel y los tres años y medio. Además de las penas de prisión, los magistrados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial impusieron a los condenados multas que, en algunos casos, llegan hasta los 110.000 euros

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha rechazado los argumentos esgrimidos por los condenados, que se basaban en una supuesta vulneración del derecho a la inviolabilidad de las comunicaciones, del derecho a la presunción de inocencia, del derecho a un proceso con garantías y del derecho a la tutela judicial efectiva.

El 30 de agosto de 2010 el ECO de la Guardia Civil desarticuló esta red británica dedicada al tráfico de drogas en discotecas y zonas de ocio de Eivissa con la detención de veinticinco personas, a los que se les incautaron 38.000 pastillas de éxtasis y cuatro kilos de cocaína, entre otras sustancias estupefacientes.

La organización, que era dirigida desde el Reino Unido, había alquilado villas de lujo en Eivissa para los responsables de la red y pisos o apartamentos en las zonas de más afluencia turística para los distribuidores de la droga, según informó en su momento la Guardia Civil.

En el marco de esta operación Flecha fueron detenidos catorce hombres y once mujeres, veinte de ellos de nacionalidad británica, dos irlandeses, un checo, un eslovaco y una española.

Según la Guardia Civil, los detenidos integraban la organización de tráfico de drogas más activa de la isla, que se dedicaba a la venta de pastillas de éxtasis y otras drogas en las proximidades de las zonas de ocio de la isla, que en verano recibe miles de turistas jóvenes.