La juez del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, condenó ayer ‘in voce' a un hombre que estaba acusado por la comisión de un delito contra la ordenación del territorio. El acusado, B.G.R., de 54 años de edad y de nacionalidad francesa, promovió unas obras en una finca de su propiedad denominada Can Blai y ubicada en zona calificada como Área Natural de Especial Interés (ANEI) en las que construyó una serie de tres muros de hormigón que, en total, sumaban más de 102 metros de longitud.

Según se explica en el escrito de acusación del ministerio público, que en principio reclamaba una pena de tres años de cárcel para el francés, éste lo hizo «en fechas indeterminadas pero próximas a 2005» y «sin licencia alguna».

La defensa del acusado y el representante del ministerio público alcanzaron un acuerdo de conformidad mediante el cual B.G.R., que carece de antecedentes penales, aceptó una pena de diez meses de prisión y una sanción económica de 15 meses a razón de 7 euros diarios, lo que suma un total de 3.150 euros, así como la inhabilitación durante un año y medio para la profesión de promotor.