Fotografía de archivo del torero José Ortega Cano. | Ra

La Audiencia de Sevilla ha dado a las partes cinco días para que se pronuncien sobre la petición de indulto presentada por el torero José Ortega Cano respecto a la sentencia que le condenó a dos años y medio de cárcel por un accidente mortal de tráfico.

Fuentes del caso han informado a Efe de que la Sección Primera de la Audiencia, al haber sido el tribunal que elevó la condena al torero, ha iniciado la tramitación del indulto, para lo cual ha pedido sus alegaciones al fiscal y a la acusación particular que ejerció la viuda del fallecido, Carlos Parra.

Finalmente, el tribunal emitirá su propia posición, que trasladará a la Dirección General de Indultos para la decisión final que adopte el Consejo de Ministros, proceso que tardará varios meses.

Tanto la Fiscalía como la acusación particular que ejercen los letrados Luis y Andrés Avelino Romero han adelantado que se opondrán a la concesión del indulto porque no concurren los «motivos extraordinarios» previstos en la ley.

El plazo para alegaciones concluye el próximo martes día 11, han añadido las fuentes.

Encarcelamiento

El pasado 23 de enero, la juez que emitió la primera condena contra Ortega Cano, la titular del juzgado de lo penal 6 de Sevilla, rechazó la petición del torero de que se aplace su encarcelamiento mientras se tramita el indulto, aunque la medida está paralizada dado que el interesado ha presentado un recurso de reforma y subsidiariamente ante la Audiencia de Sevilla.

La juez de lo penal dijo entonces que la petición de suspender el ingreso en prisión es un intento de «dilatar en el tiempo» lo que debe ser «el cumplimiento y acatamiento de la resolución judicial» y rechazó el alegato del torero sobre su delicado estado de salud, ya que en las cárceles hay unos buenos servicios médicos «que velan por la salud de toda la población reclusa».

Ortega Cano fue condenado a dos años y medio de cárcel por un accidente de tráfico mortal ocurrido en mayo del 2011 en una carretera próxima a su finca de Castilblanco de los Arroyos (Sevilla), cuando conducía con una alcoholemia triple de lo autorizado.

La juez de lo penal impuso al torero dos años y medio de cárcel por delitos de homicidio imprudente y conducción temeraria, que luego la Audiencia de Sevilla elevó a otro delito por conducir bebido pero sin incrementar los años de cárcel.