La casa de la familia del pequeño Daniel, ubicada en Sant Antoni.

El Ayuntamiento de Sant Antoni emitió el pasado viernes una orden de ejecución para demoler todas las columnas del patio de la casa de la calle Mossèn Ribas i Ferrer, del municipio de Portmany, donde falleció el pequeño de siete años, Daniel Stuart Pasmiño.

En un relato cronológico de la actuaciones municipales, el Consistorio explicó ayer que horas después del desgraciado suceso que tuvo lugar el pasado miércoles 2 de mayo, «el aparejador realizó un informe técnico a petición del concejal de Urbanismo en el que se determina que la columna que cayó, y provocó la muerte del menor, carecía de forjado y anclaje».

Asimismo, un día después, el jueves, «el arquitecto técnico municipal concluye su informe en el que reafirma el mal estado de la columna y determina que deben revisarse el resto de columnas del patio de la casa», a la vez que el viernes ordena la demolición de las columnas y así se lo comunica a los propietarios de la vivienda y a la Policía Judicial.

La repatriación

Según Sant Antoni, la orden de demolición se ejecutará tras obtener «el permiso del juez» y depués de que los técnicos municipales procedan, mañana, a la documentación gráfica del estado actual de las columnas.

Por otra parte, ayer se presentó ante los medios de comunicación el abogado y portavoz de la familia de Daniel, Cándido Valladolid Portas, que fue contactado por el Consulado de Ecuador en Palma y que hará este trabajo de forma «gratuita» debido a los pocos recursos económicos de los que dispone la familia del pequeño fallecido, según explicó en rueda de prensa.

Valladolid compareció para pedir ayuda económica para repatriar al menor a Ecuador «por expreso deseo de sus padres».

Según explicó, «esta humilde familia no tiene los requisitos económicos para sufragar el gasto de repatriación» y quieren hacerlo «lo antes posible». Valladolid señaló que ahora, los padres solo pueden ver el cuerpo del pequeño «media hora al día» en el tanatorio de Can Negre y que su objetivo es repatriarlo para darle sepultura cuanto antes.

Por ello, pidió la colaboración ciudadana para sufragar los gastos de repatriación y facilitó una cuenta en la Caixa [número 2100-0349-780101305640] para que la ciudadanía pueda colaborar en que «Daniel descanse en paz», afirmó.

Asimismo, Valladolid agradeció a la Asociación de Ecuatorianos de Eivissa y Formentera por su colaboración, así como al Consulado de Ecuador, cuyos representantes visitaron a la familia y ayudaron a solucionar un requisito legal que impedía poder efectuar la repatriación ya que el pequeño era de nacionalidad española.

Por último, el abogado señaló que la familia «tiene intención de abandonar el domicilio» porque estar en la misma vivienda «le causa graves daños psicológicos».