Ante la situación de incertidumbre que se ha vivido entorno al Grupo Playa Sol, algunos proveedores han paralizado los pedidos a la espera de que Fiscalía finalice con la intervención de las cuentas bancarias de la entidad empresarial. Así lo manifestó ayer a este periódico el responsable de una empresa de distribución al por mayor, que prefiere guardar su anonimato.

«El día 31 siempre se paga a los proveedores, pero como las cuentas han estado intervenidas no se pagó ni ayer (por el lunes), ni hoy (por ayer), pero nos han informado que en el momento que se nombre a un administrador judicial, que esperamos que sea mañana (por hoy), ya podremos cobrar», apuntó la fuente. De hecho, indicó que desde su empresa se han paralizado los pedidos existentes hasta que se cobren las últimas mensualidades.

Al parecer, el responsable de GPS, Fernando Ferré Cardó, es el que negocia los plazos de los pagos y, en este caso concreto, se paga a nueve meses. «Estamos intentando cobrar la deuda más grande, que corresponde al mes de agosto del pasado año», señaló. Ante esta situación, el empresario apuntó que confía en que la situación vuelva al cauce normal y poder seguir trabajando. Aún así explicó que, en su caso, cuenta con un aval por si en algún momento Ferré no llegase a pagar las deudas comprometidas, aunque reconoció que esta práctica de contar con una garantía para el futuro no es habitual. «Si no tuviésemos este aval, dudo que suministrásemos a sus establecimientos», señaló.

Los trabajadores

De hecho, algunas de las empleadas de los establecimientos GPS aseguraron que no cuentan ya con productos de limpieza. Alguna de ellas aseguraron ayer que lo único que les dieron fue «desengrasante» para desempeñar sus tareas y que en la mayoría de los casos se dedican a «hacer las camas y a limpiar el suelo», apuntaron a este periódico. Lo mismo sucede en el mantenimiento de los establecimientos. Guillermo Quintiero, uno de los trabajadores de la sección de mantenimiento apuntó que la situación está «bloqueada» ya que no saben a quien pedir ni vales ni el material necesario.

El portavoz del Partido Popular en el Consell, Pere Palau, también se ve afectado, en menor medida, por la situación de la empresa Grupo Playa Sol. Y es que según ha podido sabe este periódico, Ferré Cardó también actuaba como «agencia» con diferentes establecimientos hoteleros de la Isla. Este es el caso de Palau, donde tras varios intentos de compra de unos apartamentos ubicados en Sant Antoni, Ferré se dedicaba a reservar plazas y enviar clientes: «La gestión del establecimiento, limpieza y todo lo demás lo llevamos nosotros, él sólo nos enviaba clientes», señaló Palau.

En este sentido, Palau apuntó que la situación es «preocupante y más cuando pasa al inicio de la temporada turística». Aún así quiso mantener la prudencia y transmitir «tranquilidad y seguridad» a los turistas.

Palau señaló que espera no tener problemas tras la situación de la empresa «ya que por ahora hay demanda y si no nos lo envían ellos vendrán de otro lugar, es una especie de touroperador». Asimismo, Palau indicó que, independientemente de la gestión de la empresa, «no se puede permitir que se cree un problema ya que no sólo afecta a las plazas turísticas de los hoteles que tiene sino también a la oferta complementaria».

Al parecer, el hasta ahora administrador del Grupo Playa Sol , Fernando Ferré, no sólo realiza esta actividad de 'suministro de clientes' a otros establecimientos, sino que también cuenta con varios hoteles en régimen de alquiler tanto en la zona de Platja d'en Bossa como en Sant Antoni, lugares donde tiene grandes propiedades.

El grupo declaró 70 millones de ventas netas en 2008

Según los datos que aparece en la página web www.alimarket.net, el Grupo Playa Sol declaró en ventas netas hasta 70 millones de euros durante el ejercicio 2008. En esta época, y según la misma fuente, la empresa contaba con 1.400 trabajadores. En 2007, por su parte, con una media de 850 trabajadores, GPS facturó 50 millones de euros. En 2008 el grupo empresarial de Ferré Cardó contaba con 3.825 habitaciones hoteleras y 1.781 habitaciones de apartamentos. En total, gestionaba 6.252 unidades alojativas.

Ocupación escalonada y ahorro en personal y mantenimiento

Una de las prácticas habituales del Grupo Playa Sol es la apertura de los establecimientos de forma escalonada, a pesar de que en su página web se puede reservar plaza en cualquiera de sus hoteles. Según fuentes del sector, GPS abre las puertas de diferentes hoteles en varias zonas y deriva los clientes del resto de establecimientos, ubicados en lugares cercanos, a aquel que está abierto. Esto supone, según otros hoteleros, ahorrar una gran cantidad tanto de personal del hotel como de mantenimiento de los establecimientos. De esta forma, Grupo Playa Sol se garantiza primero llenar las plazas de un establecimiento para luego abrir de forma continuada el resto de hoteles. Actualmente, y a pesar de haber empezado ya la temporada turística, aún restan muchos establecimientos turísticos de la cadena por abrir sus puertas.