La Autoritat Portuària investigaba ayer el alcance de los daños, en principio no peligrosos, y la causas de la desafortunada maniobra del Murillo, ferry de la compañía Acciona, cuando el buque zarpaba a mediodía de ayer del puerto de Eivissa con destino a Barcelona con 101 pasajeros y 40 vehículos a bordo. El bulbo del barco impactó contra los pantalanes del Duque de Alba cuando se procedía al desatraque provocando, al parecer por un despiste de la tripulación, destrozos de consideración en esta zona del puerto.

 

Fuentes portuarias informaron de que el Murillo, que llegó a echar el ancla, estuvo parado durante unos minutos mientras los prácticos supervisaban la proa del ferry por si existía alguna daño de importancia en el casco. El buque continuó posteriormente su rumbo normal. La Capitanía Marítima de Eivissa dio parte del suceso a la inspección de Barcelona por si se consideraba conveniente realizar una revisión del barco a su llegada a este puerto. Todo apuntaba a que no había daños personales.

El 'Murillo' fue protagonista 48 horas antes de otro accidente similar. El buque, posiblemente por una racha de viento, colisionó en la maniobra de atraque contra un dique del puerto de Maó, reabierto tras estar 13 horas cerrado. Dos camiones resultaron dañados.