Un vecino de Santa Eulària que carece de carné de conducir fue sorprendido en dos ocasiones y en menos de cinco horas circulando borracho por el casco urbano de este municipio. El infractor, un hombre de 39 años que deberá responder de cuatro delitos contra la seguridad del tráfico, fue detenido también el año pasado por conducir en estado de total ebriedad (1'37 mg/l).

R.H. fue interceptado por primera vez a las tres de la tarde de anteayer cuando una dotación de la Policía Local de Santa Eulària patrullaba por la avenida de Cala Nova y detectó a un coche que realizaba maniobras extrañas. Ante la posibilidad de que su conductor pudiera ir bebido se decidió darle el alto.

Indicios

Las sospechas y los indicios que se evidenciaron en un primer momento se confirmaron en el retén policial después de que R.H. se sometiera al etilómetro y diera tasas de 1'04 y 0'89. Los agentes imputaron un segundo delito al acusado ante la carencia de permiso de circulación y lo dejaron en libertad tras informarle de que debía presentarse a la autoridad judicial para un juicio rápido. A la vez se le informaba de que su vehículo quedaba inmovilizado.

Los mismos agentes volvieron a encontrarse con una situación idéntica poco antes de las ocho. Al parar un todoterreno que circulaba de manera errática por el casco urbano de Santa Eulària. Al volante de este vehículo volvía a estar R.H. que, lejos de haberse serenado, volvía a dar síntomas de ebriedad. Tras volver a pasar por la prueba de alcohol, éste dio tasas de 1'25 y 1'24.

Otro residente de Santa Eulària, el alemán K.H., fue detenido también durante la madrugada del domingo tras dar 0'84 mg/l en un control policial. Otros tres conductores fueron denunciados administrativamente por ir bebidos sin superar la tasa de 0'60. Además, se inmovilizaron otros dos vehículos por estos hechos.