Los médicos de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario piensan que lo más probable es que D.N., un canadiense de 36 años de edad que el pasado día 2 sufrió un grave accidente al caer desde una altura aproximada de cinco metros, no logre recuperar la movilidad en las extremidades inferiores.
D.N. se precipitó desde una barandilla a la que se subió al parecer para tomar una fotografía. Ocurrió sobre las nueve y media de la mañana. En el suelo, consciente, advirtió de que no podía mover las piernas al personal de la ambulancia de la UVI móvil del 061 que lo trasladó al hospital de Can Misses.
Varias horas después, los médicos tomaron la decisión de trasladarlo a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. Ya a última hora de la tarde se le realizó una resonancia para comprobar su estado.
D.N. padece una compresión medular que, probablemente, según los médicos, le impida volver a mover las piernas.
El día anterior se produjo un accidente muy parecido, pero con mejor pronóstico. El francés J.C.B., de 67 años de edad, paseaba en bicicleta por los pequeños acantilados de las inmediaciones del hotel Los Loros, en Santa Eulària, una zona conocida como sa Caleta, y se precipitó desde una altura también de cinco metros, aproximadamente.
Resonancia
Una vez inmovilizado en una camilla, los bomberos hicieron una cadena humana para rescatar al herido y subirlo en la UVI móvil que lo trasladó a Can Misses. Desde este hospital se le derivó a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, donde se detectó mediante una resonancia la compresión medular que padecía y fue sometido a intervención quirúrgica.
J.C.B. evoluciona favorablemente y está recuperando la sensibilidad en las extremidades inferiores, según los médicos de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario.
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