GUILLERMO ROMANÍ

El simulacro de incendio que se llevó a cabo ayer en Formentera demostró que con personal preparado y material adecuado se puede hacer frente al fuego. Pero no desveló la rapidez de respuesta en situaciones complicadas en geografías discontinuas, es decir, en las islas.

El teniente coronel de la Unidad Militar de Emergencias (UME), Fernando García de las Hijas, responsable del tercer batallón, cuyo ámbito de acción es Valencia, Murcia y Balears, reconocía que la capacidad de respuesta debe valorarse desde varios puntos de vista. «Las respuestas de la UME pueden tardar varias horas y los motivos son claros, en primer lugar que la base de los efectivos está en Valencia, pero trasladar el personal puede hacerse de forma relativamente rápida entre dos y cuatro horas, pero si es necesario material pesado que deba trasladarse en barco, la respuesta es más larga puede llegar a las doce horas», en especial cuando las condiciones climatológicas complican la navegación marítima.

En el día de ayer habían desplazado ocho vehículos y 31 personas desde Eivissa ya que durante la parte central de agosto un destacamento está en la Pitiusa Mayor. «Hemos de conocer el entorno, las infraestructuras, no podemos dejar nada a la improvisación -dijo García de las Hijas-, hemos de saber cómo podemos trabajar y coordinarnos», señalando que la UME en Balears comenzó hace apenas dos años y que ya se han efectuado simulacros en todas las islas, siendo el de ayer el que cerraba el ciclo en la comunidad autónoma.

El simulacro, nivel 1 y con un perímetro teórico de cinco hectáreas de terreno afectado por el fuego, estaba organizado por la consellerias de Medi Ambient y de Interior del Govern, y contó con efectivos del Ibanat en Formentera así como del personal y material del Consell de Formentera, desde Bomberos, Policía Local, Protección Civil y con el apoyo del destacamento de la UME que está estos días en Eivissa.

Asimismo había vehículos, en especial los dos helicópteros del 112 y del servicio de emergencias del Govern, mientras que la avioneta con base en Eivissa se limitó a hacer una descarga simbólica y regresó a su base mientras que otra avioneta, de tipo planeador, estuvo sobrevolando la zona durante las horas que duró el simulacro como centro aéreo operativo visual.

Competencias

De todas maneras quedó claro, así lo explicó la consellera de Interior del Govern, María Àngeles Leciñena, que en caso de incendios de nivel 0 o 1, la competencia siempre es local, autonómica y sólo cuando se llega a la categoría 2, el máximo es 3, es el momento en que la UME interviene. Sin embargo el teniente coronel García de las Hijas explicó que la UME siempre está informada de los incendios que se producen en su radio de acción y que en casos en que el incendio aunque sea de menor importancia pero puede afectar a personas o viviendas, ellos pueden decidir intervenir sin necesidad de que se llegue a una alerta 2.