Absuelta la pareja apresada por la policía en sa Penya cuando no podían estar juntos

El suceso ocurrió en sa Penya a mediados del pasado mes de mayo cuando una patrulla vio a ambos cogidos de la mano cuando al acusado, un toxicómano que acudía habitualmente al barrio a proveerse de droga, había sido advertido previamente por los agentes de que recordara que existía una orden de alejamiento.

Ambos tuvieron que sentarse en el banquillo del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa días después de su detención cuando precisamente se estaba pendiente de un indulto del Gobierno solicitado porque la afectada, vecina de sa Penya y embarazada, quería estar con su novio y que disfrutara de su futuro hijo. «Yo no le tengo miedo. La denuncia la interpuso mi familia porque no le gusta que esté conmigo por sus problemas con las drogas», dijo en el juicio la mujer.

Toxicómano

El sospechoso precisamente fue apresado, según su versión, cuando fue a sa Penya con el mono para comprar una dosis que necesita desde que se declaró drogodependiente hace algo más de tres años. «Me la encontré. Yo subía y ella bajaba», relató. El encuentro motivó que ambos acabaran en el juzgado. Al hombre, como sospechoso de un delito de quebrantamiento de condena, y la mujer como cooperadora necesaria. El primero se enfrentaba a una nueva condena de nueve meses de prisión y su compañera a una pena de seis. Sin embargo, el fiscal decidió al final de la vista oral retirar los cargos contra la mujer al prevalecer la presunción de inocencia de que ésta se hubiera topado con él en una barrio que su novio frecuentaba habitualmente.

La absolución plena en este caso se ha producido después de que la abogada de la defensa hiciera especial hincapié en este juicio sobre otros precedentes y resoluciones de tribunales superiores que destacaban la imposibilidad de cometer un delito de estas características cuando el bien defendido, en este caso la mujer, consentía totalmente en estar con su pareja.