Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Eivissa pertenecientes a la Unidad UCRIF de la Brigada de Extranjería irrumpieron en un hotel de Platja den Bossa y solicitaron la documentación a más de cien trabajadores, de los que cinco de ellos fueron trasladados a las dependencias policiales al detectarse que se encontraban en situación irregular en el país, informaron ayer desde Comisaría.

Tras las investigaciones y los interrogatorios la policía tramitó un atestado que ha sido remitido al juzgado de guardia por un delito contra los derechos de los trabajadores.

La operación se realizó a primera hora de la mañana del pasado jueves, cuando agentes de paisano apoyados por efectivos de la Brigada de Seguridad Ciudadana entraron en el hotel. Tras las declaraciones los cinco fueron puestos en libertad, aunque dos de ellos, K.O.M.H., de 38 años, español de origen ecuatoriano, y C.J.M., español de 53 años, declararon en calidad de imputados no detenidos. La policía, señalan desde Comisaría, constató que los trabajadores no estaban dados de alta y que no se respetan ni los horarios ni los descansos y que trabajan por un sueldo de 6 euros la hora.