La juez Martina Rodríguez, titular del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, ha dictado una sentencia absolutoria en el caso de un vecino de la avenida Pedro Matutes Noguera que el pasado marzo tuvo que sentarse en el banquillo acusado por su pareja de haberla golpeado y tirado del sofá después de una disputa por el mando surgida minutos después de que el sospechoso terminara de ver un partido de fútbol. El fallo absolutorio se ha dictado después de no haberse apreciado ni lesiones ni pruebas concluyentes en la versión de la mujer, totalmente contradictoria con la del hombre, un residente de nacionalidad marroquí.

El suceso ocurrió después de que el sospechoso regresara al domicilio tras bajar a la calle para tirar la basura y la pareja, además, se disputara un trozo de manta que compartían en el sofá. Según lo manifestado por éste, que se jugaba nueve meses de cárcel, su pareja acabó por denunciarlo por una rabieta surgida porque no le había hecho de caso durante la retransmisión del partido de fútbol.

«Ella tampoco me habló en hora media. No contestaba a nadie. Cuando está enfadada entra en el dormitorio y me dice que estoy castigado, que debo irme al sofá y que no se me ocurra entrar en el dormitorio», relató el acusado durante la vista oral.