La muerte de Emilio M.V., de 65 años y miembro de uno de los más importantes clubes de motociclismo de Eivissa, se certificó este fin de semana después del coma irreversible en el que había entrado el pasado día 4, fecha en la que dicha persona resultó con gravísimas heridas cerebrales tras un accidente ocurrido en el casco urbano de Santa Eulària. Al parecer, la víctima, natural de la provincia de Valencia, se dirigía a un evento motorista cuando perdió el control de su vehículo a pocos metros de un paso de cebra y, pese a llevar casco, cayó golpeándose fatalmente la cabeza. En el siniestro, también resultó herida de levedad una mujer de 69 años que en ese momento cruzaba la calle.
Esta es la segunda persona que pierde la vida este año en las Pitiüses en un accidente de circulación después de que el pasado 22 de marzo pereciera en Sant Carles un conductor rumano que no llevaba puesto el cinturón de seguridad tras estrellarse contra un talud en una distracción.
Emilio M.V., conductor de una moto del tipo Harley, fue evacuado a la Policlínica de Nuestra Señora del Rosario después de que el 061 lograra su reanimación tras treinta minutos de denodados esfuerzos en el lugar del siniestro, en la confluencia de las calles Sant Llorenç y del Mar de Santa Eulària. El paciente ingresó en estado crítico. Los médicos diagnosticaron que durante los minutos que siguieron al accidente faltó el riego sanguíneo al cerebro, circunstancia que hizo que su situación fuera irreversible. Sus compañeros de club tenían previsto ayer tarde concentrarse en la puerta del tanatorio de Puig den Valls durante una hora para rendirle, de esta manera, un homenaje.
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