El fiscal pidió ayer cuatro años y nueves meses de prisión para un hombre que fue detenido por la policía como sospechoso de robar a punta de navaja a un conocido suyo en es Pratet el pasado 30 de marzo y que, a su vez, terminó siendo relacionado con otro atraco ocurrido una semana antes en ses Figueretes. El ministerio público retiró la acusación contra dicha persona por el primer caso después de que el denunciante matizara el relato de lo sucedido y afirmara no sólo haber encontrado el dinero supuestamente sustraído sino también dudar de que el asaltante hubiera usado un cuchillo para intimidarle. «Ayer mismo encontré el dinero en otra chaqueta», dijo el testigo.

El acusado fue capturado por la policía inmediatamente después de que se informara de este robo a una patrulla que había en la zona de la antigua plaza de toros de Evissa.

Una vez en Comisaría, se le mostró su foto a la víctima del robo en ses Figuertes, persona que dijo que sólo vio los ojos al asaltante porque éste llevaba tapada la cara con una braga y una gorra. El ladrón huyó tras presionar el estómago del perjudicado con un cuchillo y apoderarse de 600 euros. Ayer, en el juicio, tampoco reconoció plenamente al acusado.