Los dos vocales del CGPJ, ayer, junto al presidente del TSJ, Antoni Terrasa, y el juez José Espinosa. Foto: IRENE G. RUIZ

Los dos vocales territoriales de Balears del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Antonio Monserrat Quintana y Carles Cruz Moratones, que ayer se desplazaron a Eivissa junto con el presidente del TSJ, Antoni Terrasa, aseguraron que desde el máximo órgano de los jueces se está haciendo todo lo posible por cambiar la situación de «déficit estructural» que sufre la isla en la Administración de Justicia. «No puede continuar la situación actual», afirmó Cruz Moratones después de los encuentros que ambos vocales tuvieron con representantes municipales y del Consell, así como con sus compañeros de Eivissa.

La cuestión de un nuevo edifico judicial sigue sobre el tapete a la espera de nuevas decisiones mientras que ahora todos los esfuerzos se están centrando en conseguir refuerzos para la plantilla de Eivissa, especialmente durante los meses de verano, y en conseguir que el Ministerio de Justicia apruebe cuanto antes la constitución en la isla de un juzgado específico de violencia sobre la mujer. Al respecto, la Sala de Gobierno de este órgano ha aprobado esta cuestión y ahora todo depende de que Justicia también le dé el visto bueno a esta iniciativa que en la isla se considera como «urgente». «Esto está más que justificado», explicó uno de los vocales.

«Hemos querido explicarle a los jueces de Eivissa que tienen el apoyo de los vocales y transmitir el mensaje de que entre todos lo conseguiremos», señaló Cruz cuando recordó que resolver las carencias de Eivissa es un problema en el que hay implicadas varias administraciones.

«No hay ninguna decisión en firme. Todo indica que la opción englobada en el proyecto Eivissa Centre es la solución más buena de las posibles», dijo. «Mientras tanto se están buscando una solución temporal con el traslado de la mayor parte de las dependencias a un inmueble o locales que se consigan», añadió.

Al respecto, el proyecto del nuevo edificio judicial, dentro de la opción de Evissa Centre, está ahora pendiente de un contencioso después de que se reclamara como BIC parte de la actual estructura de sa Graduada.