Agentes de la Policía Local de Sant Antoni detuvieron ayer por la mañana al español R.C.C. por un presunto delito contra la seguridad vial cuando al parar el vehículo que conducía para ser denunciado por no respetar una línea longitudinal continua observaron que presentaba síntomas de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Fue sometido a la prueba de la alcoholemia y dio 0,79 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Cuando los agentes trasladaban a R.C.C. se encontraron con un vehículo de cara que circulaba invadiendo el carril contrario, por lo que el coche policial tuvo que hacer una maniobra evasiva para evitar el choque.

Al dar el alto al conductor, los agentes de la Policía Local de Santa Antoni vieron claramente cómo el conductor, el británico K.B., estaba bebido. También dio resultado positivo en el test de la alcoholemia: 0,94 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.