De «Pachá» a los calabozos de Comisaría. Así acabaron dos jóvenes que fueron juzgados ayer, con penas de nueve meses de cárcel, después de que un taxista los entregara a la policía cuando, tras subirse a su vehículo, los vio registrando un bolso y haciendo comentarios que despertaron sus sospechas. Los dos acusados señalaron que todo se había debido un «lamentable error» después de que confundieron el bolso de un amiga con el de otra mujer.

Los dos sospechosos fueron detenidos en ses Figueretes cuando tras salir de madrugada de la discoteca se subieron a un taxi. «No me cuadraba nada. Empezaban a sacar lo que había dentro del bolso y comentar uno con otro sus descubrimientos, así como a hacer referencia a los billetes que había en su interior. Gritaban cada vez que examinaban un objeto», explicó el taxista. «Por eso decidí fijarme bien para ver si veía alguna unidad policial y los llevaba hasta donde ésta estaba», añadió.

Así lo hizo el taxista, que nada más ver a una dotación de la Policía Local que estaba poniendo una multa en la calle Pais Vasc se dirigió hacia los agentes. En unos instantes les contó sus sospechas. Los dios acusados fueron entregados en Comisaría, lugar donde pasaron más de 24 horas antes de ser entregados en el juzgado.

Según ambos jóvenes, la novia de uno de ellos que los había dejado minutos antes les llamó diciendo que se había dejado el bolso y les pidió que lo encontraran. En este sentido declaró una joven que compareció en el juicio que se celebró ayer por este asunto ayer en el juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa.

El arresto de ambos individuos se concretó cuando uno de los agentes les preguntó que si sabían de quién era el bolso que llevaban y uno de ellos dio un nombre que no correspondía con la documentación que había en su interior.