El «aparcacoches» magrebí detenido por la sustracción de catorce cuadros del pintor Antonio Villanueva en un almacén de Eivissa se aprovechó supuestamente de la confianza que éste había depositado en él para apoderarse de las obras de arte que fueron recuperadas por la Guardia Civil en un domicilio de Sant Jordi. Éste realizó en su día trabajos para el artista en su estudio y bien pudo tener acceso al interior del inmueble con una copia de las llaves necesarias para abrir los candados con los que estaban cerradas las puertas y rejas, según determinó la investigación efectuada por la Policía Judicial.

El sospechoso, que anteayer tarde pasó a disposición judicial y que tras declarar ante el juez quedó en libertad provisional, es supuestamente la persona que sustrajo los lienzos y posteriormente se las ofreció a V.U.B., el vecino italiano de Sant Jordi que, según ha trascendido ahora, presuntamente actuó como perista.

El «aparcacoches», un hombre de nacionalidad argentina que se movía en los ambientes marginales y que frecuentaba la zona de es Pratet, negó ante el juez haber robado las pinturas ni guardar alguna relación con un posible trato con V.U.B. Mientras el juez continúa la instrucción del caso, dicha persona, como medida cautelar, tendrá que presentarse periódicamente en el juzgado para estampar su firma y por el momento está acusado de un presunto delito de hurto.

El juez también dejó días atrás en libertad provisional al vecino de Sant Jordi, persona que bien pudo obtener los cuadros tras contactar con el «aparcacoches» por los «contactos» que éste tenía en sa Penya, lugar conde el italiano llevaba a cabo trabajos de rehabilitación, según se desprende de la información recogida por este periódico.

Los cuadros sustraídos fueron intervenidos por la Policía Judicial de la Guardia Civil antes de que éstos pudieran ser introducidos en el «mercado negro» de obras de arte. Los lienzos de Villanueva, que prepara una valiosa colección para un importante hotel de la isla de próxima inauguración, aún no habían sido expuestos. Sin embargo, se calcula que los lienzos, por la cotización de este artista, podían tener un valor que oscilaba entre los 20.000 y los 80.000 euros, según la obra de que se hablara.