Un mujer de nacionalidad británica que estaba en tratamiento con metadona falleció anteanoche en un apartamento del Edificio Tánit de Sant Antoni presumiblemente a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria, informó ayer el concejal de Gobernació de la localidad, José Ramon Serra, Pilot. La fallecida, R.M.M., tenía, 34 años de edad. Con ella estaba un amigo, propietario del piso del edificio Tánit, en el momento del fallecimiento.

Al piso en el que falleció la mujer se dirigió una ambulancia, cuyo personal no pudo más que certificar la defunción. Una vez más, el servicio del 061 no informó a la opinión pública de esta nueva muerte relacionada con las drogas ocurrida en la isla.

La Policía Local de Sant Antoni recibió el aviso de la muerte a las 23,28 horas del pasado martes. Al parecer, el amigo de la mujer ha relatado a las autoridades que estaba sentando frente al ordenador cuando acabó por darse cuenta de que su acompañante había fallecido.

La mujer en las últimas semanas había acudido tres veces al servicio de urgencias del hospital de Can Misses. La metadona es una droga que emplean como sustituto los adictos a la heroína cuando deciden emprender un proceso de desintoxicación.

En la pasada madrugada del domingo al lunes falleció otra mujer británica, Carla Newman, también en Sant Antoni, cuando intentaba pasar de un balcón a otro por la fachada. Cayó desde un segundo piso.

El sábado murió otro británico en Sant Antoni, Kieran Formby, tras consumir cuatro pastillas de éxtasis, según dijeron sus amigos a la policía. Semanas atrás, otros dos británicos murieron por drogas en Sant Antoni.