EFE / ALMERÍA

El cuarto y último menor detenido por su presunta implicación en la reyerta en la que el senegalés Ousmane Kote murió apuñalado por un varón de 26 años identificado como J.J.O., que sigue en paradero desconocido, ha ingresado en un centro de internamiento por orden del Juzgado de Menores de Almería. El joven español afincado en Roquetas de Mar (Almería), que cumplirá 18 años en aproximadamente dos meses, ha prestado declaración hasta el mediodía de hoy, tras lo que le ha sido practicada una prueba psicotécnica, previa a la lectura del auto judicial, han informado a Efe fuentes del caso.

Tras una larga deliberación y siguiendo las recomendaciones de la Fiscalía, el juez ha ordenado el ingreso cautelar en un centro de internamiento del joven, que ya se vio implicado en una pelea cuando tenía 13 años, en tanto la jueza que instruye el caso levante el secreto sumarial, momento en el que se podrá determinar el grado exacto de participación en los hechos de cada uno de los implicados. Ha desoído de este modo el juez las peticiones del letrado de la defensa del joven, casado y con una hija, que ha reclamado su puesta en libertad por su buena integración y por estar a la espera de obtener un puesto de trabajo en un almacén agrícola.

Aunque por el momento no ha trascendido el centro en el que permanecerá en régimen de internamiento, las fuentes han revelado que el cuarto menor implicado en la reyerta no coincidirá en las instalaciones con ninguno de los otros tres jóvenes a los que los investigadores consideran coautores del homicidio, pues el juez ha estimado oportuna su incomunicación.