El joven británico Michel Robertson, de 23 años de edad, se ha convertido en la quinta víctima mortal de este año en Eivissa relacionada con las drogas -ninguna de ellas española-, exceptuando a otros dos fallecidos que murieron por consumo de heroína.

Su muerte se produjo ayer sobre las diez de la mañana en el hospital de Can Misses, informaron fuentes del Ib Salut. Había ingresado en este centro hospitalario sobre las once de la noche de anteayer, trasladado por una ambulancia del servicio del 061 escoltada por un vehículo de la Policía Local de Sant Antoni, informó ayer el concejal de Gobernació del municipio, José Serra Pilot.

La patrulla policial fue requerida anteayer por la noche por responsables del Hotel Ibiza Rocks. Una vez en el establecimiento los agentes fueron conducidos ante la presencia de Michel Robertson. También acudió al lugar una UVI móvil del servicio del 061.

Con los equipos allí, el joven británico sufrió al menos tres paradas cardiorrespiratorias, pero los especialistas consiguieron salvarle la vida en las tres ocasiones. Al parecer, ya en la UVI móvil, sufrió una cuarta parada cardiorrespiratoria que también se logró solventar.

Tras pasar la noche en Can Misses, Robertson falleció a las diez de la mañana. Según informaron desde la Policía Local de Sant Antoni, «todo parece indicar el joven consumió un cóctel de sustancias estupefacientes y alcohol», algo que también estimaron desde el Ib Salut pero que tendrá que ser confirmado a través de autopsia. El resultado de los análisis que determinarán los tipos de droga que consumió tardarán meses, como siempre en Eivissa.

José Serra se ha puesto en contacto con la cónsul británica en la isla, Helen Watson, a quien trasmitió el pésame por este nuevo joven compatriota fallecido por drogas.